Fernando Fernández
Pese a haber rodado durante bastante tiempo por un banquillo LEB -Gijón-, a Diego Tobalina Robla (Oviedo, 1976) se le presenta una oportunidad que no está dispuesto a desaprovechar. La destitución de Jareño le permitió dar un salto vertiginoso desde la EBA (dirigía al Palma Playa Park, de cuya salvación tiene mucha culpa) para ponerse al frente de un vestuario que derrocha calidad, experiencia y ambición.
Y con la llegada de Lou Roe, Tobalina capitanea un Palma Aqua Mágica llamado a viajar hacia la ACB. Para empezar esa apasionante travesía, los de Ciutat deben ganar al Gandía (viernes, 21 horas). Estar en los «play offs» es el primer objetivo de la entidad presidida por Miquel Ramis. Desde ese punto, y llegando en el mejor momento del curso, todo es posible.
Tobalina explica el radical cambio experimentado por el Aqua Mágica basándose en tres aspectos que han marcado un punto de inflexión. «El primero es la recuperación anímica de los jugadores... estaban deprimidos tras cuatro derrotas consecutivas. Se perdió en Manresa, pero la cosa había cambiado. El otro punto es la recuperación de jugadores lesionados (Lewis, Lacey...) y, del que todo el mundo habla, el fichaje de Lou Roe nos da un plus de calidad añadido y eso se nota», comenta el preparador asturiano.