Fernando Fernández
Se le acusa de «chuparuedas», de especulador y de poco deportivo, pero Andrea Dovizioso (Forli, 1986) puede presumir de un arma que le convierte en el piloto más constante del Mundial: su regularidad. Este argumento fue el que esgrimió para ser campeón del mundo de 125 (2004), con cinco victorias y cinco segundos puestos en su haber, pero por encima de todo, para aplazar hasta Cheste la celebración del título del cuarto de litro por parte de Jorge Lorenzo. Además de una rueda buena o la aspiración de quien le precede, el piloto del Team Scott Honda puede presumir de ser todo un seguro a la hora de entrar en los puntos. Y, además, su rivalidad con Giorgio viene de lejos. Del Europeo del octavo de litro de 2001, más concretamente, pero ha vivido episodios épicos como el final con foto-finish incluída en Qatar (2004) y triunfo del balear. Armado de una enorme paciencia y de sangre fría, el piloto de referencia de Honda en la cilindrada media sumó el domingo en Estambul su tercera victoria en 250, la octava de su carrera. Esa cifra fue la conseguida por Jorge durante el curso 2006 y refleja que la constancia es una virtud que brilla en la personalidad de Andrea Dovizioso, quien con esos guaritmos ha logrado un título y un subcampeonato.
Tanto, que acumula un total de 23 carreras sumando puntos de manera consecutiva. Desde el 25 de septiembre de 2005, en Sepang (Malasia), el 34 siempre ha entrado en la zona de puntuación, pero el grueso de las oportunidades lo ha hecho para subir al cajón o pegarse con los mejores. Tres triunfos (Catalunya y Portugal en 2006 y Turquía 2007) adornan esta brillante estadística, en la que figuran cinco segundos puestos (Losail, Shanghai, Le Mans, Brno, Sepang 2006) y seis terceros (Jerez, Estambul, Mugello, Assen 2006, Jerez 2007 y Losail 2005). Cuarto ha sido en tres ocasiones, (Sachsenring, Phillip Island y Motegi 2006), en dos ocasiones quinto (Losail 2007 y Phillip Island 2005), en una sexto y tras superar una caída intentando seguir el ritmo de Jorge (Donington 2006), séptimo en Cheste 2006, cediendo el Mundial al piloto del Fortuna Aprilia, y otra vez en Valencia (2005) firmó su peor registro, noveno.