Tolo Jaume
Miquel Alzamora esboza una sonrisa. Epistard de Artà ha dejado atrás los diagnósticos más pesimistas y mira con optimismo hacia el Campeonato de España. El campeón del mundo de americana fue sometido ayer a su primera sesión de magnetoterapia y seguirá con dicho tratamiento tras serle aplicado un vendaje que le permitirá seguir entrenando con la vista puesta en la primera cita del Palma Arena.
El ciclista mallorquín, que sufrió una caída en la segunda etapa de la Challenge Illes Balears en la que se produjo una fractura de costilla, no entrenó a lo largo de la jornada de ayer, pero los médicos le han permitido seguir ejercitándose con normalidad. «Me han dicho que puedo seguir rodando para no perder todo el trabajo que he hecho hasta ahora», dijo eartanenc, que a partir de hoy tendrá que acudir por la mañana y por la tarde a sesiones de magnetoterapia para «soldar» la fractura.
Alzamora, que está en los planes del seleccionador Didac Navarro, podría llegar en condiciones para el Campeonato de España de ciclismo en pista que tendrá lugar en el Palma Arena, aunque su participación podría quedar limitada a las pruebas de carácter individual, ya que la modalidad de americana representa un esfuerzo con el brazo que no podría afrontar el mallorquín, que se muestra optimista ante la posibilidad de estar en una prueba que puede resultar decisiva para determinar la lista de corredores que formará la selección española en el Mundial. El mallorquín, que asegura que siente menos dolor una vez que le ha sido aplicado un vendaje especial, había adquirido el tono necesario para afrontar los desafíos que se avecinan después de haber sufrido una caída en el pasado Europeo celebrado en Ballerup, pero ahora afronta una nueva lucha contra el crono para llegar a la cita mundialista.