VIVEMENORCA | 83 |
DKV JOVENTUT | 77 |
VIVEMENORCA (19+22+22+20): Moss (16), Rodríguez, Stojic (14), McCoy (7), Bazdaric (13) -cinco inicial- Yáñez (5), Alzamora (14), Ivanov, Vasiljevic (12) y Farabello (2).
DKV JOVENTUT (22+20+13+22): Huertas (8), Fernández (15), Archibald (14), Sullivan (1), Gaines (10) -cinco inicial- Vázquez (4), Laviña (4), Flis (2), Rubio (6) y Betts (13).
Àrbitros: Arteaga, Requena y Rosado. Sin eliminados.
Incidencias: 5250 espectadores.
Lluís Orfila|MAÓ
El ViveMenorca se puso el disfraz de «matagigantes», y aleccionó al DKV Joventut bajo el amparo de una grada entregada, que volvió a estar a la altura de la ocasión. Andaba la hinchada menorquina deseosa de celebrar un triunfo ante uno de los grandes, y que mejor oportunidad que la que se presentaba ayer. Enfrente, un rival orgulloso, consciente de su potencial, aunque mermado por las ausencias de hombres importantes como Bennett, Dueñas o Barton.
Con todo, el Joventut dispuso de opciones, aunque su desacierto en el tiro, unido al buen hacer de Stojic y Vasiljevic en momentos puntuales, acabaron por confirmar la tercera derrota consecutiva de los de Aíto, a la par que siginificaba un balón de oxígeno para el Menorca, que atisba las salvación algo más cercana. Si algo caracteriza al Menorca de Casas es su capacidad para no amedrentarse ante nadie, y ante el histórico equipo verdinegro volvió a ratificarlo.
De inicio, Stojic se emparejaba con Rudy Fernández, mientras que este alternaba el puesto de base con Marcelinho Huertas. La igualdad era la tónica (4-6, 11-10, 15-16), aunque el dominio catalán en el rebote de ataque hacía temer lo peor. Sin embargo, la entrada en pista de Alzamora -gran partido el suyo- niveló la batalla en la pintura, a la vez que impedía a los pívots rivales anotar con facilidad. Rudy Fernández anotaba el único triple de los suyos en todo el partido, con dedicatoria a la grada incluida, y que situaba el luminoso en 18-22.