Efe|BARCELONA
Primero Etoo, después Messi. El Barcelona se ha quedado sin dos de sus tres delanteros titulares hasta febrero, otro contratiempo más para Frank Rijkaard justo cuando el equipo se juega sus opciones europeas y tiene a la vuelta de la esquina su participación en el Mundial de clubes. Messi se lesionó a poco de empezar el partido en una acción con Zapater. Deberá ser intervenido de una fractura en el quinto metatarsiano del pie izquierdo, la misma lesión sufrida en el pasado Mundial por el baloncestista Pau Gasol, que todavía le mantiene inactivo. El argentino no tiene suerte con las lesiones. La parte final de la temporada pasada se la pasó en blanco después de sufrir una dolencia muscular en el partido de vuelta ante el Chelsea (7 de marzo). Leo estuvo cuatro meses de baja y no pudo participar, por ejemplo, en la final de la Liga de Campeones que conquistó el Barca en París.
Los médicos ya han advertido que este tipo de lesiones son complejas y que requieren una buena recuperación. Messi, que se había hecho con un puesto como delantero en la banda derecha, dejará su puesto a Giuly y Rijkaard volverá a tener que improvisar. El holandés ya lo tuvo que hacer cuando se confirmó que Eto'o estará cinco meses de baja por una rotura en el menisco, pero entonces tiró de la logística y alineó al delantero que se había fichado para sustituir a Henrik Larsson como suplente de Eto'o, el islandés Eidur Gudjohnsen. La suerte para Rijkaard es que Javier Saviola decidió quedarse en el equipo, a pesar de que los servicios técnicos le habían recomendado un cambio de aires. Gracias a esa decisión, el entrenador del Barcelona dispone de una nueva opción en la delantera, un jugador determinante como lo demostró ante el Zaragoza, aunque ahora está lesionado.
La enfermería barcelonista se completa con otros lesionados de menor duración. Josi Ednilson estará unos diez días de baja por un esguince en el tobillo, Xavi Hernández no fue convocado en el último partido por una fisura en la tibia, pero su vuelta al equipo es inminente, y Belletti se lesionó en el entrenamiento previo al partido contra el Zaragoza. Pero sin ninguna duda, la mejor noticia para Rijkaard y para el barcelonismo fue la recuperación de Ronaldinho. Cuestionado su estado de forma desde principios de temporada, el brasileño ha experimentado una espectacular mejoría, especialmente en el terreno físico, base fundamental para su juego de desborde. A pesar de todo, el centrocampista ha conseguido nueve goles en los quince partidos jugados a principios de temporada (8 en Liga y 1 en Champions) y ha tomado el relevo goleador del lesionado Eto'o. Rijkaard sabe que si la mejor versión de Ronaldinho aparece, las importantes bajas de Eto'o y Messi se pueden minimizar y todo apunta a que el brasileño ya ha despegado. Otra cosa diferente será comprobar qué posibilidades tiene Rijkaard como alternativa a Giuly. En su momento podía decidirse por Saviola. Ahora Ezquerro gana enteros.