Tolo Jaume
Las rampas de Galilea fueron uno de los enclaves donde se decidió el Trofeu Internacional Palmanova-Magaluf, pero, además, fue el escenario en el que Miquel Joan Adrover dejó detalles que invitan a pensar que estará en la pomada de la Challenge. «Todo dependerá de cómo vayan las piernas», comentó a la conclusión de la carrera el corredor del Club Ciclista Ses Salines con una sonrisa que evidenciaba su satisfacción por la tercera plaza conseguida en la carrera reservada para los ciclodeportistas, Máster 30 y Máster 40.
En el mismo territorio las cosas le fueron mejor en 2005, pero las sensaciones del mallorquín vuelven a ser buenas en vísperas a una Challenge que se advierte muy emocionante teniendo en cuenta la larga nómina de candidatos que ya ha aparecido sobre el asfalto en la Copa de Europa y en la segunda jornada de la Semana Internacional de Masters.
Adrover se hizo con la tercera plaza el pasado año y este año aspira a más ante un grupo de competidores selecto. Ha encontrado el golpe de pedal para estar con los mejores en la segunda jornada de competición y sólo espera reivindicar el buen estado de forma exhibido en las pruebas venideras.