Manzano mira al talento. El entrenador del Mallorca dejó ayer abierta la puerta de la revolución. Aunque no quiso desvelar el once, el técnico de Bailén apuntó que está buscando una tendencia más ofensiva: «Ante el Villarreal podemos jugar igual que en el tramo final contra el Espanyol porque el equipo tiene jugadores de distinto corte, tanto defensivo como ofensivo, y en función de la alineación se puede jugar de una manera u otra.
Mientras esta apuesta nos dé resultado no está mal, pero el problema es cuando un equipo rival nos domine el centro del campo, tengamos problemas defensivos y el equipo se desequilibre. Para ello debemos tener la posesión y llevar la iniciativa», aclaró ayer el técnico mallorquinista.
La rueda de prensa giró en torno al once, a los posibles cambios en los carriles (Jankovic y Arango por Jonás y Pisculichi) y a la posibilidad de alinear de salida a dos delanteros natos como Maxi López y Víctor. Manzano esquivó todas sus preguntas porque guardará bajo llave los once titulares hasta la charla previa al encuentro de mañana: «Intentaremos buscar al mejor equipo posible para ganar el partido. No tengo ninguna duda del once, pero no lo voy a decir».