Fernando Fernández
Llegó la hora de la verdad. Después de meses de sondeo en el mercado, tensas negociaciones, una pretemporada redonda y un verano que ha servido para poner a punto las maquinarias, la LEB más exigente de todos los tiempos echa a andar. Lo hace con muchos nombres ilustres en los banquillos y sobre el parqué, y con Drac Inca y Palma Aqua Mágica como actores principales. El listón del pasado curso está alto, pero ambos clubes pretenden reeditar un curso único y dar el salto de categoría que el baloncesto mallorquín precisa. Hablar de ACB no es una utopía y el camino se inicia esta noche en dos frentes: Inca y Tenerife.
No es una temporada más. La competición ha adquirido una nueva denominación y desde esta primera jornada será conocida como Liga Adecco LEB, en virtud del acuerdo de colaboración firmado por la Federación Española de Baloncesto y la empresa de gestión de recursos humanos.
El proyecto del Drac Inca será el primero que se pondrá a prueba en partido oficial y ante su hinchada en un choque plagado de peligros, pero en el que la estadística habla en favor del cuadro de es Raiguer, que recibe en el Palau (21 horas) a un Alerta Cantabria en la jornada inaugural de la Liga Adecco LEB. No podrá contar el cuadro mallorquín con el concurso de Joan Riera, a quien una tendinitis en la rodilla -molestia que no es nueva- le ha dejado sin entrenar a lo largo de la semana, con lo que Ted Berry está llamado a asumir el grueso de la dirección del juego gualdinegro.