Efe|NUEVA YORK
Rafael Nadal echó el cierre a su periplo en el US Open. Y lo hizo en los cuartos de final y ante un Mikhail Youzhny que siempre tuvo las cosas claras y en el cuarto y último set dio todo un recital ante un Nadal entregado y que con un 5-0 en contra pareció arrojar la toalla. Youzhny venció al balear por 6/3, 5/7, 7/6 y 6/1 con lo que se gana el billete para las semifinales y aparta de la lucha por el último Grand Slam del curso al tenista de Manacor, que supo reponerse tras un 6/3 en contra en la primera manga, igualando la contienda. En etie break de la tercera, el ruso se hizo fuerte y asestó un golpe que sería letal para Nadal.
Tenía que ganar los dos sets que se le avecinaban para culminar la remontada, pero Youzhny quiso sentenciar por la vía rápida. Tanto que Nadal se veía desbordado y con un 5-0 en contra contempló como volaban por los aires sus ilusiones de poder ganar el US Open ante un público que disfrutó de un partido eléctrico en algunas de sus fases y que sirvió para poner fin a la aventura de Nadal en Nueva York.
La marcha triunfal del suizo Roger Federer, número uno del mundo, continuó en el Abierto de Estados Unidos al conseguir su pase a los cuartos de final con la victoria por 6-3, 7-6 (7-2) y 6-3 ante el francés Marc Gicquel.
El número uno del mundo, que disputa el séptimo Abierto, tendrá como rival en los cuartos al estadounidense James Blake, quinto cabeza de serie, que pudo con el checo Tomas Berdych.
Federer, que busca conseguir su tercer título consecutivo en el Abierto y el noveno de Grand Slam, dominó por completo el partido y sólo en el segundo permitió que Gicquel, verdugo de Juan Carlos Ferrero y de Gastón Gaudio, le hiciese trabajar un poco más forzando el «tiebreak», que lo ganó fácil.
En el tercero, Federer, de 25 años, también dejó que el Gicquel mantuviese su saque y en el séptimo tuviese dos pelotas de break point, pero una vez más, el indiscutible número uno el mundo surgió con los golpes perfectos para ponerse con 4-3.
Federer consideró que había llegado el momento de definir el partido ante la posibilidad que volviese a caer la lluvia sobre el Centro Nacional de Tenis «Billie Jean King» y fue él quien en el octavo le rompió el saque al francés para sentenciar en el noveno.
«Creo que ha sido un partido muy bueno para mi porque lo empecé bien, luego mi rival metió golpes ganadores y saco sólido y al final conseguí ganar el partido sin forzar ningún set que era otro de los objetivos que tenía», declaró Federer, que se convirtió en el vigésimo séptimo campeón defensor del Abierto que alcanza los cuartos de final.