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Los jugadores de la selección española coincidieron ayer en que cuajaron un partido discreto contra Arabia Saudí (1-0), pero se mostraron contentos con haber ganado y pasar a octavos con nueve puntos.
«Hemos sufrido mucho en los últimos minutos después de no haber aprovechado varias ocasiones. No hemos jugado como en partidos anteriores», admitió el delantero valencianista David Villa, quien reemplazó a Raúl en el descanso.
Villa, así mismo, manifestó que «es muy importante» para la confianza del equipo «pasar con nueve puntos». «Quizá lo que nos ha faltado ha sido conseguir el segundo gol que nos hubiera dado tranquilidad», apuntó.
En cuanto al rival de octavos, el asturiano señaló que «Francia puede ser el coco de los tres, pero si otro equipo está por delante es porque ha sido mejor».
«Está claro que ahora empieza el Mundial de veras. Esto da moral porque hasta ahora sólo dos equipos habían ganado todos los partidos. Cualquiera que nos toque va a ser complicado», indicó.
Cesc Fábregas, centrocampista de la selección española, que ayer fue titular en el partido que el equipo de Luis Aragonés ganó a Arabia Saudí (1-0), reconoció que el juego no fue bueno, pero resaltó que «el campo no ayudó porque estaba seco y lento».