Europa Press|LONDRES
El estreno en hierba de Rafael Nadal, reciente ganador de Roland Garros por segundo año consecutivo, fue pospuesto por la intensa lluvia que caía sobre la pista de Londres, donde se disputa el torneo de Queen's. El mal tiempo obligó a aplazar tanto los partidos que se estaban jugando como los previstos, entre ellos el de Nadal, que junto a Feliciano López formaba la pareja de dobles que debía enfrentarse a los británicos Auckland y Delgado. El tenista estadounidense Mardy Fish será el rival del español Rafa Nadal en la segunda ronda del torneo de Queen's, puntuable para la ATP y dotado con 800.000 euros en premios. El americano logró su pase para la siguiente fase al imponerse con suma facilidad del británico Jamie Baker por 6-1, 6-3 y ahora se cruzará por segunda ocasión en su carrera con el manacorí.
El número dos del mundo tendrá un duro inicio su preparación sobre la hierba para ajustar su juego en vistas a Wimbledon puesto que el americano es un buen jugador sobre rápida, aunque ya la venció en Indian Wells este año por 6-1, 6-4. Además, la segunda jornada del torneo londinense dejó el triunfo del estadounidense James Blake, quinto cabeza de serie, sobre su compatriota Justin Gimelstob por 7-5, 6-1. El tenista manacorí aseguró que la temporada de hierba llega un poco pronto para marcarse objetivos muy altos. «Tengo que cambiar muchas cosas. Pero todavía no sé qué. Tal vez ahora no sea el mejor momento para hablar de eso porque necesito cambiar mucho en mi juego y en mi mentalidad», indicó.
Y es que si en la tierra batida acumula el récord de 60 victorias consecutivas, el manacorí es consciente de su debilidad en la hierba, una superficie en la que deberá mejorar mucho para aspirar algún día al título en Wimbledon. Con apenas tres victorias en seis partidos sobre césped, Nadal tiene que adecuar su juego a la superficie más veloz, pero dice que no sabe cómo hacerlo. «Veremos qué debo cambiar. Debo jugar más agresivamente. Debo sacar con más decisión. Debo sacar como en los momentos importantes en tierra batida», destacó. Nadal perdió el tren a Londres, aunque media hora después de llegar, ya estaba en la cancha de entrenamientos. «Quería practicar un poco para sentir el césped. Pero me siento un poco mareado en la cancha. Las piernas muy cansadas», dijo.