Después de su contundente triunfo en el Masters Series de Montecarlo, Rafael Nadal no esperaba tener que sufrir tanto para revalidar su título en el Trofeo Conde de Godó. Estuvo contra las cuerdas en su duelo de cuartos ante Nieminen, pero había demasiadas cosas en juego como para rendirse. Sacó el partido adelante, supo sufrir ante Almagro y ayer doblegó con claridad a Tommy Robredo en la final. Su victoria le permite alcanzar las 47 victorias consecutivas sobre tierra batida, cifra que supera el registro de Bjorn Borg (46) y que le permite soñar con igualar a Guillermo Vilas (53), que tiene el récord absoluto.
Las victorias de Rafael Nadal son diferentes este año. Ha dosificado las celebraciones en los puntos y ya no se tira al suelo para festejar sus triunfos. No lo hizo la semana pasada cuando ganó en la final del Masters Series de Montecarlo a Roger Federer, ni lo hizo ayer cuando doblegó a Tommy Robredo en la final del Trofeo Conde de Godó.
Celebraciones al margen, lo cierto es que Rafael Nadal va camino de firmar un año tan positivo como el del curso anterior. Su segundo Conde de Godó le permite aumentar el número de victorias en 2006 hasta tres (Dubai, Montecarlo y Barcelona), cuando el calendario sigue moviéndose en el tramo más favorable para el balear.
Pese a los apuros que pasó en el choque de cuartos de final ante Jarkko Nieminen y en la semifinal ante Almagro, Rafael Nadal volvió a demostrar que sigue siendo el jugador más fuerte sobre tierra batida. Cuando ganó el año pasado no cedió ni un solo set en todo el torneo. Este año si lo ha hecho, aunque vuelve a regresar a la Isla con el trofeo en la maleta.
En el Conde de Godó ha ganado cinco partidos, lo que le ha permitido situar su récord en 47 victorias consecutivas sobre tierra batida. El nombre de Rafael Nadal aparece ya junto al de Vilas, Borg o Muster, los jugadores que durante la historia del tenis han dominado los torneos sobre arcilla.
De hecho, la marca de Rafael Nadal es la segunda mejor de la historia. En Montecarlo superó a Thomas Muster y en Barcelona dejó atrás a Bjorn Borg. El sueco logró un total de 46 triunfos entre octubre de 1977 y mayo de 1979, mientras que el balear ha ganado de forma consecutiva 47 partidos.
Ahora Rafael Nadal se ha fijado como meta alcanzar a Guillermo Vilas, que lidera esta lista con 53 victorias. El mallorquín alcanzaría al mítico jugador argentino si la próxima semana se alza con el título en el Masters Series de Roma. En el Foro Itálico también intentará revalidar el título que ya cosechó el año pasado y tendrá a Roger Federer como principal rival.
Si Rafael Nadal continúa prolongar su excelente racha en el TMS de Roma, tendrá la oportunidad de firmar la mejor racha de la historia del tenis sobre tierra batida en el Masters Series de Hamburgo. Si ganara también la primera ronda de la cita alemana alcanzaría las 54 victorias, algo que no ha hecho nunca nadie antes.
El calendario se sigue moviendo por los torneos que más favorecen a Rafael Nadal, aunque el mallorquín tiene claro que su máximo objetivo a medio plazo es revalidar el título de Roland Garros, cita que se disputará del 29 de mayo al 11 de junio.