El Palma Aqua Mágica recibe hoy a partir de las 17:00 en el Palau d'Esports al Ciudad de Huelva tras ver reducido su margen de error por los resultados de sus rivales en la zona alta de la tabla clasificatoria de la LEB. Mario Palma debuta en el banquillo de Son Moix con la necesidad de frenar la racha de cuatro derrotas consecutivas que han sumado los mallorquines entre liga y Copa Príncipe, aunque no le va a la zaga la necesidad de su homólogo en la escuadra onubense, puesto que Quim Costa precisa frenar la sangría de derrotas que acumulan los suyos para eludir la zona pantanosa de la clasificación.
El encuentro de esta tarde cierra una jornada en la que a excepción del Drac han ganado todos los que pugnan por el ático de la LEB, por lo que el conjunto de Ciutat no puede permitirse otro tropiezo si no quiere perder la estela de sus principales competidores.
De regreso a su hábitat natural el Palma Aqua Mágica pretende devolver a Son Moix el cartel de fortín que le ha acompañado durante buena parte del curso y dispondrá de sus mejores hombres para atajar una crisis que le ha hecho salir de las cuatro primeras plazas por primera vez en la presente temporada.
El estreno de Mario Palma supone un aliciente más a un encuentro al que el Palma Aqua Mágica llega dolido por la derrota sufrida ante el colista Melilla y la prolongada racha de malos resultados que ha sumado lejos de su centro de operaciones. A diferencia de la pasada semana el técnico portugués ha dispuesto de las sesiones necesarias para aplicar su filosofía de juego. Y es que el seleccionador de Angola tiene mimbres suficientes para construir un bloque capaz de aspirar a todo y su hoja de servicios invita a pensar que la comunión de ambos aspectos puede culminar en la reacción de la escuadra balear.
El Ciudad de Huelva aterriza en la Isla con bajas sensibles, especialmente la de un viejo conocido de la afición mallorquina, Isma Torres, que salió del Drac Inca salpicado por la polémica. La ausencia del ex jugador gualdinegro se une a la del último fichaje de los andaluces, el pívot estadounidense Michael Stewart, por lo que El potencial interior de los onubenses está debilitado.
Así las cosas, Robert Battle tiene una buena oportunidad para volver a moverse por los registros que solía, aunque lo cierto es que una de las prioridades de Mario Palma es dotar a su equipo de un potente juego colectivo por encima de las individualidades que le han valido durante buena parte de la presente campaña.