La última pieza del puzzle mallorquinista ya está encima del tapete. El portugués José Carlos Nunes solucionó en la mañana de ayer los últimos detalles de su contrato, a continuación era presentado y sólo un par de horas más tarde se enfundaba el mono de trabajo y se ponía a los órdenes de Cúper en Son Bibiloni para completar su primer entrenamiento como rojillo. El central afirma que llega a la Isla con las pilas totalmente cargadas y asegura que está listo para debutar este fin de semana, por lo que podría convertirse en la principal novedad de la convocatoria de cara al partido frente al Deportivo.
A sus 28 años, tendrá el privilegio de ser el primer jugador luso que viste la elástica mallorquinista y lo hará exactamente durante las próximas tres temporadas y media después de que el club insular haya abonado los 2,5 millones de euros que exigía el Sporting de Braga para facilitar el traspaso. El futbolista heredará el dorsal 16 que portaba hasta ahora Adrián Peralta y se le ha encomendado la misión de sellar una defensa que sigue bajo sospecha.
El defensa compareció por primera vez en la sala de prensa de Son Moix acompañado del presidente y máximo accionista, Vicenç Grande, que le presentó como un «fichaje importante» después de agradecer su disposición a la hora de fichar por la entidad rojilla: «Él ha sido el que ha querido venir aquí y yo se lo agradezco porque como le pasa a todos los grandes jugadores, tenía más ofertas. Es un fichaje importante y ha supuesto un gran esfuerzo para nuestro club», subrayaba el máximo responsable del club.