Los jugadores del Palma Aqua Mágica ejercieron ayer de Reyes Magos y su visita al Hospital de Son Llàtzer generó más ilusión si cabe que su buena temporada en la Liga Española de Baloncesto. Los jugadores y el cuerpo técnico encabezado por Eloy Doce repartieron regalos entre los niños ingresados en el recinto hospitalario para posteriormente hacer las delicias de los chicos y chicas que disfrutaba de la jornada de vacaciones en el parque infantil de Ifebal.
Los colíderes de la LEB, que no pierden de vista su compromiso liguero ante Los Barrios del próximo domingo en el Palau Municipal d'Esports de Son Moix, adelantaron la cabalgata e interprearon a su manera a los Reyes Magos en la planta de pediatría de Son Llàtzer, donde su estatura causó admiración entre los más pequeños, que disfrutaron con los pósters y regalos que recibieron de manos de todos los integrantes del plantel.
Los jóvenes lo pasaron en grande, tanto o más que los jugadores, que aparcaron la intensidad y competitividad que demuestran en la pista para mostrar su cara más humana. Los rostros sonrientes de los Battle, Miller, Llompart, Vallmajó y compañía delataban el buen ambiente que reinó durante la visita en la que la plantilla repartió entradas entre los padres y personal de Son Llàtzer.