Carlos Montes de Oca|VITORIA
El Mallorca sanea sus cuentas. Con el triunfo amarrado ayer en
Mendizorroza, el grupo de Cúper ya supera los dividendos que generó
la pasada temporada en la primera vuelta. Hace un curso, el equipo
balear cruzó el ecuador del campeonato con un botín escaso en sus
alforjas. Apenas 14 puntos contabilizaba el conjunto isleño en la
jornada 19. En el presente torneo, cuando faltan todavía cinco
partidos para que la primera vuelta eche el cierre, el Mallorca
acumula un punto más (15), una cifra que el equipo bermellón no
superó la pasada campaña hasta la jornada ¡21! El proyecto 2005-06
supera las prestaciones del curso pasado. Y es que aquel Mallorca
se estancó después de vivir una pequeña resurreción con la llegada
de Cúper, tras el destituido Benito Floro. De repente, el bloque
entró en barrena, acabó el año 2004 con sólo 13 puntos en su
casillero y finiquitó su peor primera vuelta desde su regreso a la
realeza, en el verano de 1997, con sólo 14 puntos.
En el presente campeonato, con los triunfos conquistados en Cádiz y Vitoria en dos de sus tres últimos desplazamientos, el saco de puntos se ha engordado de forma considerable, hasta el punto de alcanzar los 15 en la jornada 14º, dos más de los que sumaba la pasada temporada a estas alturas. Esos dividendos, con cinco jonadas de la primera vuelta del curso en el horizonte, permite soñar con una cifra que ronde los 20 puntos. Cabe recordar que la mejor primera vuelta dela historia del Mallorca en Primera División data de la temporada 1998-99, con Héctor Cúper en el banquillo, cuando atravesó el ecuador con ¡32 puntos! en la mochila. Posteriormente, hasta la deficiente campaña pasada, el equipo siempre abrió la segunda vuelta con al menos 20 puntos en su casillero. Así, en la Liga 01-02, con Sergio Kresic en el banquillo, llegó con 20; a la siguiente, con Gregorio Manzano, alcanzó los 27; en la temporada 2003-04 con 23 puntos y la pasada con los 14 anteriormente mencionados.
El Mallorca divisa un final de primera vuelta complicado. Para empezar, el próximo domingo juega en El Sadar ante el colíder Osasuna, el único equipo que sigue la estela del Barça y que suma todos sus partidos ante su hinchada por victorias, siete de siete. Además, se da la circunstancias que el Mallorca jamás en su historia ha abandonado el estadio navarro con los tres puntos en su equipaje. La pasada campaña, en un duelo agónico, logró un empate que pudo ser una victoria si el colegiado hubiera dado validez a un gol fantasma conseguido por el japonés Yoshito Okubo. Tras visitar Pamplona, el Mallorca recibirá en el estadio de Son Moix la visita del Atlético de Madrid. El conjunto de Bianchi sigue sin alzar la vista y se mantiene en tierra de nadie, sin aspiraciones ni agobios.