Luis Miguel Pascual|PARÍS
Si se cumplen todos los pronósticos, el brasileño del Barcelona Ronaldinho Assis recibirá hoy el Balón de Oro de 2005 en una fiesta en la que el prestigioso premio de la revista «France Football» festejará sus 50 años con una ceremonia en la que estarán presentes buena parte de los ganadores vivos. Pocas veces el nombre del laureado ha estado tan claro como en esta edición. No sólo porque todos los rumores apuntan al centrocampista blaugrana -que incluso ha sido visto en compañía de reporteros de la revista francesa para hacerse la foto con el Balón-, sino también porque su gran rendimiento a lo largo del año le hace destacar con creces sobre el resto de los favoritos.
Difícil resulta encontrar pronósticos que no sitúen al
barcelonista como el ganador del premio. Su nombre se impone al de
dos centrocampistas ingleses que también han completado una gran
temporada: Frank Lampard, del Chelsea, y Steven Gerrard, del
Liverpool.
Ronaldinho reúne todas las características típicas del ganador de
este premio que desde hace 50 años se empeña en destacar a un
individuo en un deporte colectivo.
El genial delantero brasileño del Fútbol Club Barcelona no es ya
un recién llegado al fútbol europeo -ámbito geográfico al que se
limita el Balón de Oro-, como lo demuestra su tercera plaza del año
pasado, cuando además fue elegido mejor jugador del mundo por la
FIFA.
Desde su llegada al Viejo Continente, procedente del Gremio de
Porto Alegre, Ronaldinho no ha parado de crecer como futbolista, y
su desembarco en el Camp Nou supuso su consagración como uno de los
grandes del continente.