James Mibey y Jennifer Titika hicieron buenos los pronósticos y conquistaron ayer la décima edición de la media maratón Palma-Calvià, que vio como caía su mejor registro en categoría masculina en posesión de Toni Peña. Los africanos fueron los dominadores de una cita que contó con una inscripción de 527 atletas que tuvieron que afrontar un recorrido en el que la lluvia aumentó la dureza el trazado y se erigió en el principal adversario para la mayoría de corredores.
La Plaça d'Espanya se inundó de deportistas para desafiar la climatología a lo largo de los 21,097 kilómetros del recorrido que unió el centro de Ciutat con el polideportivo de Magaluf pasando anteriormente por el Paseo Sagrera, los muelles comerciales, el Paseo Marítimo, Cala Major, Illetes, Bendinat, Portals Nous, Costa d'en Blanes, Son Caliu y Palmanova.
Prácticamente desde el pistoletazo de salida, que tuvo lugar a las 10 de la mañana, los atletas africanos fueron los encargados de marcar el ritmo y de empezar a marcar las primeras diferencias. James Mibey, Hussein Nasser y Edwuin Kipletin formaron una tripleta prácticamente inalcanzable. Y es que antes de afrontar las duras rampas de Bendinat la selección estaba hecha y los favoritos ya disponían de una amplia renta sobre sus perseguidores. Precisamente el ingreso en las carreteras de Calvià coincidió con los momentos más duros de la prueba, ya que la lluvia y el viento complicaron un trazado cuyo ecuador presentaba el terreno más duro.
Kipletin fue perdiendo comba hasta que el pulso entre Mibey y Hussein fue irreversible. Ambos se plantaron en la recta final separados por muy pocos metros y Mibey sacó provecho de su mayor frescura para cruzar en solitario la línea de meta parando el cronómetro en 1:03:43, una marca que permite al atleta keniano arrebatarle al olímpico mallorquín Toni Peña el honor de contar con el mejor tiempo de la cita en su décimo aniversario.
El etíope Nasser Hussein cubrió la distancia en tres segundos más que el vencedor, mientras que el tercer clasificado, Edwuin Kipletin, marcó un registro de 1:04:10. En la cuarta plaza apareció Miquel Capó Soler del Club Atletisme Inca
En lo que a la prueba femenina se refiere, cabe resaltar que la carrera fue un monólogo de Jennifer Titika, que no tuvo rival y paró el cronómetro en 1:20:30. La keniana se quedó a las puertas de pulverizar el mejor tiempo de la prueba en categoría femenina, pero obtuvo mucha diferencia respecto a la segunda clasificada.
La primera atleta local en cruzar la meta fue Melina Sagrera, que firmó una buena actuación con 1:28:14. La atleta del Marathon Mallorca-Toni Peña aventajó en cinco minutos a su compañera de club Àngels Sos, que precedió en la línea de llegada a Alejandra Malagueño, que logró una marca de 1:35:15 que le permitió adjudicarse la victoria entre las M-40. Gemma Miró y Cecile Viel fueron quinta y sexta, mientras que Lydia Gayá terminó séptima como mejor M-35 con un tiempo de 1:41:47.
Veteranos
Entre los veteranos M-35 el triunfo correspondió a Nasser Hussein,
mientras que la victoria en M-40 fue para Santos Martínez con
1:12:21. En M-45 el mejor tiempo fue el de Fernando Megías con
1:19:32 y en M-50 el más rápido resultó Fernando Romero con
1:19:41.
José Vallejo se impuso entre los M-55 con 1:27:11 y Sebastià Nicolau y Hermann Huuck hicieron lo propio en M-60 y M-65 con 1:42:13 y 1:46:50 respectivamente.
La lluvia respetó en buena medida a la media maratón Palma-Calvià, aunque hizo acto de presencia y obligó a los participantes a esforzarse al máximo. Los constantes cambios de ritmo que obligan las subidas y bajadas desde Cala Major hasta Palmanova fueron un calvario para muchos atletas, que acusaron posteriormente el frío y disfrutaron cuando el sol les acompañó en el tramo final.
Algunos de los participantes necesitaron de asistencia médica a su llegada a la meta sin que en ningún momento llegaran a encenderse las luces de alarma, pero los servicios previstos por la organización actuaron con diligencia.
La zona de la llegada ubicada en el polideportivo de Magaluf congregó a alrededor de cien aficionados, mientras que los kilómetros que discurrieron entre Magaluf y Palmanova fueron los que gozaron de una mayor afluencia de público. Muchos turistas que apuran sus vacaciones en el término municipal de Calvià se interesaron por la prueba, cuya organización corrió a cargo del Club Marathon Mallorca-Toni Peña, el Institut Municipal de l'Esport y el Servei d'Esports del consistorio calvianer.
La entrega de trofeos, en la que también se tuvo que echar mano del paraguas, puso el colofón a una cita que saboreó el éxito de aumentar su calidad con un nuevo récord y el hecho de disponer de una elevada participación que pone de relieve la consolidación de la media maratón Palma-Calvià en el calendario atlético de la Isla, que vivirá una nueva media maratón de características similares el próximo mes de diciembre de nuevo con Calvià como escenario.