Miguel Luengo|MADRID
El debut de Carlos Moyà en el Masters Series de Madrid no pudo ser
más tranquilo, al vencer al italiano Filippo Volandri con
comodidad, mientras que David Ferrer se ganó a pulso y con coraje
su acceso a los octavos de final. Moyà se vio favorecido por una
lesión en el tobillo derecho de Volandri para imponerse por 6-0 y
6-2 y avanzar a la segunda ronda. Ferrer, undécimo favorito, sacó
fuerzas y garra de donde parecía imposible, para imponerse al
argentino Agustín Calleri por 6-3, 4-6 y 6-4, después de ir abajo
en el tercer set 1-3 y 2-4, y ya está en octavos, una ronda que
también alcanzaron ayer el estadounidense Robby Ginepri (16), y el
argentino David Nalbandian (5).
Para Moyà la victoria sobre Volandri, sin apuros ni complicaciones, significó tomar aire y aspirar a un duelo contra Tommy Robredo (13) que dejaría la parte alta del cuadro madrileño con claro sabor español, pues por ahí también va Rafael Nadal, cuyo debut se espera para hoy, a partir contra el rumano Victor Hanescu, si la última resonancia magnética que se le realizará a primera hora no aconseja lo contrario.
El hombro de Moyà, su preocupación constante de por vida, tras la grave lesión que sufrió hace varios años, respondió esta vez con contundencia. Nunca antes se había enfrentado con Volandri lejos de una pista de tierra batida, y en la rápida de 'greenset' del Madrid Arena, el saque del español hace mucho más daño. Así, el de Palma no cedió su servicio en ninguna de las seis ocasiones en las que estuvo en peligro, y sentenció su triunfo en 65 minutos para dejar el balance con el transalpino, él único que había en el cuadro, en un 4-1 favorable.