«El delantero centro vendrá, eso seguro. Depende del riesgo que queramos asumir y yo lo quiero asumir todo. Es cierto que estamos endeudados hasta las orejas, pero todavía nos fían...». Vicenç Grande lanza un órdago. El presidente del Real Mallorca, que ya ha cerrado la contratación de ocho jugadores, dio por seguro el fichaje de un «9», del ariete que desea Héctor Cúper.
Para ello, según aseguró ayer tras entregarle un carné de abonado a los alcaldes de la Isla, el club tirará de talonario: «Ninguno de los fichajes está o estará condicionado a la situación económica, sino a lo que quiera el club y si el delantero no viene no será por una cuestión de dinero. En estos últimos días, en las negociaciones para fichar a los jugadores argentinos, hemos estado discutiendo por 3.000 euros más de una hora. Puedo quedar mal si digo esto, pero me da igual porque aquí en el Mallorca se defiende hasta el último euro. Estoy seguro que nuestro entrenador querrá al mejor jugador posible al mejor precio», apuntó.
Aunque sobre su mesa se amontonan los candidatos a reforzar el ataque, el presidente del Mallorca admitió los nombres del argentino Nico Frutos, de Independiente, y del noruego Frode Johnsen, que milita en el Rosenborg y cuyo destino depende de la clasificación o no de su equipo para la Liga de Campeones. El catalán Dani García, otro de los objetivos, se borró ayer de la lista al firmar con el Olympiakos. De todas formas, apostó por mantener la calma: «Todavía faltan veinte días para cerrarse el plazo y para qué vamos a correr. Es cierto que Johnsen, Frutos y Charisteas están encima de la mesa, pero hay más nombres...».