Eduardo Nicolás Tuzzio (Buenos Aires, 1974) está más cerca del Real Mallorca. El club balear espera acortar en las próximas horas las diferencias económicas que le separan del central de River Plate, una de las prioridades de Héctor Raúl Cúper, para completar el proyecto 2005-06 en su línea defensiva. En los últimos días se han intensificado las negociaciones entre Leo Rodríguez, representante del futbolista, y Alejandro Camaño, que ejerce como interlocutor de la SAD balear. Aunque los flecos se antojan complicados, el propio Cúper se mostró ayer optimista desde Kössen: «El futuro de Tuzzio no va a pasar de mañana y espero que concluya bien porque el jugador quiere venir al Mallorca», apuntaba el técnico argentino sobre la posible llegada del central, cuyo interés ya anunció Ultima Hora el pasado lunes día 25. Leo Rodríguez, por su parte, reconocía las diferencias económicas, aunque también se mostraba optimista: «Hoy por hoy existen divergencias desde el punto de vista económico, pero ambas partes estamos haciendo un gran esfuerzo para llegar a un acuerdo. Tuzzio quiere jugar en el Mallorca y eso es importante. Vamos a ver si mañana se puede cerrar por el bien de todos», subrayaba ayer a este periódico el representa del futbolista.
El principal problema estriba en el aspecto económico. Tuzzio, que no ocupa plaza de extranjero al contar con pasaporte griego, todavía tiene contrato con River Plate para las dos próximas temporadas y el club millonario solicita 1 millón de euros por su traspaso, una cifra que excede la inversión prevista inicialmente por el Real Mallorca. Asimismo, el club balear le ofrece una temporada, prorrogable a dos dependiendo del número de partidos. Formado en la cantera de San Lorenzo, Tuzzio posee en su historial con dos títulos (1995 y 2001) logrados con el Ciclón de Boedo. En la campaña 1995, Tuzzio fue cedido al Quilmes, para regresar a San Lorenzo al año siguiente. Allí se convirtió en un futbolista imprescindible tanto en el centro de la zaga, como en la posición de pivote defensivo, rebasando los 200 partidos oficiales.
Después de conquistar su segundo campeonato con San Lorenzo, Tuzzio hizo las maletas y cruzó el charco. El central aceptó la oferta del Olympique de Marsella y debutó en Europa. Apenas llegó a disputar 17 partidos en dos años y optó por regresar a su país para enrolarse en River Plate, donde coincidió con el Guille Pereyra hasta que el pivote argentino recaló en la Isla en el mercado de invierno de la temporada 2003-04. Después de un par de temporadas notables, llegando incluso a lucir el brazalete de capitán, su futuro en River se quebró de cuajo por motivos extradeportivos. Tuzzio y Horacio Ameli, su compañero en la zaga, protagonizaron una pelea y fueron apartados del equipo por el técnico Astrada. Desde entonces, el jugador comenzó a buscarse un destino. Hasta el interés del Mallorca, su futuro apuntaba a su regreso a San Lorenzo, donde está considerado un auténtico ídolo. La oferta rojilla, sin embargo, demoró su respuesta y comenzó a negociar su fichaje por el Mallorca.