Mientras el Mallorca consumía su décimo día de stage en Kössen, las oficinas hervían para tratar de perfilar el proyecto 2005-06. La primera noticia se confirmó a primera hora de la tarde, cuando el gerente del Celta, Sabino López, confirmaba el fichaje de Jesús Perera. Al otro lado del Atlántico, en Buenos Aires, un intermediario en nombre del Mallorca negociaba con los representantes de Eduardo Tuzzio la incorporación de este central, un futbolista subrayado en rojo en la agenda de Héctor Raúl Cúper y que en las próximas horas podría convertirse en el séptimo refuerzo de la pretemporada.
Las negociaciones por el argentino Eduardo Tuzzio continuarán durante la jornada de hoy después de que las conversaciones de ayer no cristalizaran en ningún acuerdo. Tuzzio, que el próximo domingo cumple 31 años, es el futbolista que desea Cúper para cerrar las novedades en defensa, una demarcación que ya ha incorporado este verano a Maciel, Fernando Navarro y Potenza. El futbolista se encuentra libre y cuenta con pasaporte griego, dos condiciones que favorecen su llegada a la Isla. Miembros del club balear se mostraban optimistas: «Si no hay ninguna novedad, estará aquí la próxima semana», subrayaban.
Batallas
Eduardo Tuzzio es un defensa cargado de batallas. Formado en la
cantera de San Lorenzo de Almagro, que también se ha dirigido a su
representante para repescarle de cara a la próxima campaña, vistió
la zamarra azulgrana desde 1993 hasta 1995. En la primera campaña
disputó 5 partidos y en la última alcanzó los 19. Posteriormente
recaló en el Quilmes en calidad de cedido para regresar a San
Lorenzo hasta el 2001.
Se trata de un central con una técnica notable y personalidad. «Tiene dotes de mando», apuntaba anteayer Héctor Cúper cuando se le preguntó por Tuzzio. En caso de consumarse su fichaje, no sería esta su primera aventura en Europa. El central argentino cruzó el charco en el verano de 2001, para recalar en el Olympique de Marsella. No gozó de la continuidad esperaba e hizo de nuevo las maletas para recalar en River Plate.
En el conjunto millonario chocó con su técnico, Leonardo Astrada, que le apartó del equipo junto a Ameli y le abrió las puertas de salida. El principal problema estriba en las cantidades económicas que pretende percibir. Con la carta de libertad bajo el brazo, Tuzzio y su representante están apurando al máximo y las negociaciones siguen avanzando poco a poco.
Durante la jornada de hoy se volverán a ver las caras para tratar de llegar a un acuerdo definitivo. La predisposición es buena, el futbolista quiere fichar por el Mallorca y Cúper desea contar con él. En caso de que la operación no fructifique, el Mallorca piensa en el madridista Rubén como una de las alternativas.
Además de las negociaciones que mantiene con Tuzzio, el Mallorca sigue escrutando el mercado para atar el fichaje del delantero que quiere Héctor Cúper. Las dificultades que presenta la cesión del italiano Corradi, el primer candidato, han despejado el horizonte para otras alternativas secundarias, como el griego Charisteas. Otro foco de interés es la banda derecha. El club sigue soñando con la cesión del madridista Juanfran Torres, uno de los futbolistas más cotizados del verano, y también mantiene en su agenda a Fernando Sales.
Pero antes de que lleguen más refuerzos, el club debe dar salida a algunos de sus inquilinos. El primero de ellos es Jesús Perera. El delantero extremeño, que no entraba en los planes del técnico argentino, se convirtió ayer en nuevo jugador del Celta para las próximas cuatro temporadas, según declaró el gerente del club vigués, Sabino López.
El delantero, de 25 años, ya militó la pasada campaña en el Celta, al que llegó en el mercado de invierno en calidad de cedido y logró marcar cinco goles.
El rendimiento ofrecido por el jugador convenció tanto al cuerpo técnico como a la dirección deportiva que, al término de la temporada, abrió las negociaciones con el Mallorca con la intención de hacerse con sus servicios en propiedad. Unas negociaciones que se han cerrado definitivamente hoy con el acuerdo alcanzado entre ambos clubes y que ya sólo falta hacer oficial.
Lo más probable es que el jugador, que se encuentra en Kössen, viaje directamente a Gante (Bélgica), localidad donde el equipo vigués está realizando la pretemporada. Aunque la cantidad económica no ha sido confirmada por ninguna de las partes, el montante global de la operación ronda el millón de euros.
Jesús Perera no ha tenido suerte en el Real Mallorca. A los 18 años dejó su pueblo natal, Olivenza, tras un cambio de residencia, una decisión que le costó la enemistad de sus paisanos y siete meses en paro porque el Badajoz, su antiguo equipo, no le daba la baja. Después llegaron un par de campañas en el filial, incluida la 98-99, cuando el B militaba en Segunda División, y su marcha al Albacete. El club rojillo se aseguró una opción de compra valorada en 360.000 euros, sesenta millones de pesetas, que hizo efectiva dos años después tras proclamarse Perera máximo goleador de Segunda División por delante del entonces jugador del Sporting David Villa, hoy en las filas del Valencia.
En el Mallorca, sus números son discretos. Ni con Jaime Pacheco ni con Luis Aragonés ni con Benito Floro gozó de continuidad. La llegada de Cúper no le arregló su futuro. Más bien lo contrario y el delantero pacense tuvo que hacer las maletas y marcharse cedido al Celta de Vigo, de Segunda División. Perera se convirtió en uno de los indiscutibles de Fernando Vázquez, en una de las claves del ascenso.
Perera se incorporó a la disciplina isleña el pasado día 11 a pesar de las negociaciones que mantenían ambos clubes y de sus manifestaciones: «Si Cúper no me quiso en diciembre, no creo que me quiera ahora. Yo deseo jugar en el Celta», subrayaba cada vez que se le preguntaba por su futuro. Después de varias semanas de reuniones, ayer se cerró el acuerdo según el cual Perera defenderá la camiseta celeste durante las próximas cuatro temporadas.