Después de diez temporadas instalado en la categoría de bronce, el Mallorca B afronta un nuevo reto en Tercera División, donde tratará de conjugar la búsqueda de resultados con la formación de jóvenes talentos, en su mayoría mallorquines. Tomeu Llompart volverá a sentarse en el banquillo del filial rojillo, que ha arrancado su pretemporada con numerosos cambios y con la intención de recuperar el que se había convertido en su hábitat natural. La distancia que separa el grupo balear de Tercera División y la máxima categoría puede representar un obstáculo a la hora de subir jugadores de la cantera al primer equipo, pero Llompart comenta que «cuando un jugador es bueno y se puede incoporar a un grupo ya formado no debe tener ningún problema para dar el salto, ya que entrar en un equipo hecho y sentirse arropado por profesionales permite que puedan subir futbolistas», analizó el técnico inquer, que asegura que el trabajo no ha variado respecto al de otras campañas en la categoría superior. La condición de equipo recién descendido de Segunda B y de equipo filial del único representante de Balears en Primera convierten al Mallorca B en uno de los rivales a batir, por lo que a buen seguro sus adversarios se emplearán al cien por cien en sus enfrentamientos con la escuadra mallorquinista. «Ya he avisado a los jugadores de que nos van a esperar con muchas ganas, pero al fin y al cabo es una circunstancia que hace crecer al futbolista y que le permitirá coger experiencia», apunta el preparador inquer, que considera que sus jugadores son «unos privilegiados porque cuenta con unas instalaciones envidiables y con un club que pone todas las condiciones para que puedan formarse de la mejor forma posible».
Javi Moreno, Chus, Oliver, Noceras, Bernat, Ernesto, Dani González, Guzmán, Rigo, Tito, y Miguel Àngel seguirán bajo la disciplina mallorquinista, a la que se han incorporado Sergio García, Adri, Marc Torres, Gaspar, Toni Muñoz y Santos. La plantilla aún no está cerrada y en los próximos días seguirán incorporándose efectivos con los que el club bermellón mantiene contactos. Además de dos jugadores a prueba, posteriormente se podrían poner a las órdenes de Llompart tanto José como Rafita, que están concentrados con el primer equipo en la localidad austríaca de Kossen.
El sorteo de la fase previa de la Copa del Rey dejó al vigente campeón del grupo balear de Tercera, el Constància de Inca, emparejado con el Alicante de Segunda División B, sin duda un rival de entidad para el conjunto de la capital de Es Raiguer, que podrá calibrar así sus aspiraciones de cara a la próxima temporada. El encuentro de ida se disputará en Inca el próximo 14 de agosto, mientras que la vuelta se jugará en el estadio Rico Pérez de Alicante una semana después.