Carlos de Torres|COURCHEVEL
El español Alejandro Valverde, en duelo directo con Lance Armstrong
en la cima de Courchevel, se impuso en la primera etapa alpina del
Tour de Francia, en la que el americano dio un golpe de mano que
terminó con el grupo de oposición y se marcó la senda del séptimo
Tour consecutivo. Valverde, la perla del ciclismo español a sus 25
años, subcampeón del mundo en 2003, alcanzó la gloria en la primera
llegada en alto y se convirtió en el sucesor del italiano Pantani,
quien dejó un recuerdo imborrable con el último de sus 8 triunfos
en la carrera francesa en este mismo escenario. Le ganó el pulso
cara a cara al todopoderoso Lance Armstrong, que le disputó el
esprint cuando ambos llegaron a la recta de llegada junto a Fran-
cisco Mancebo, que fue cuarto y el danés Rasmussen, tercero. Esperó
a que arrancara y luego le superó con claridad, invirtiendo en los
181 kms. de viaje desde Brignoud, donde se tomó la salida oficial
hasta Courchevel 4h.50.35.
Mientras el ciclista murciano celebraba loco de alegría el día más grande de su vida, Armstrong festejaba los efectos de una lección magistral, una más, que le indicó con letras grandes el camino triunfal hasta París, y es que a las primeras de cambio, sacó el libro de estilo y terminó con todos sus rivales directos. La jornada hizo estragos y demostró que el séxtuple ganador del Tour es el de siempre y que su equipo, el Discovery, está muy bien engrasado. Erigido en productor y director de la escapada decisiva en el momento preciso, aventajó a Basso en 1.01, a Ullrich en 2.13, a Botero en 2.50, a Vinokurov, el gran derrotado en 5.18 y a Beloki en 5.35. El descalabro fue aún mayor para otros de los que se incluían en el apartado de favoritos. Así Heras se dejó en el puerto 9.49 y claro, se despidió del podio y aledaños, e Iban Mayo, el ganador del Alpe D'Huez en 2003, nada menos 21.31. Un día para olvidar si no hubiera llegado Valverde con su sorpresa final.
La general quedó encarrilada con Armstrong en su sitio natural. Rasmussen es segundo a 38 segundos y Basso tercero a 2.40. Valverde, primer español, saltó a la quinta plaza a 3.16, Mancebo es séptimo a 4 minutos, Ullrich mira al tejano a 4.02, y Vinokurov, a 6.32. Esto pasó el día que se abrió el camino del séptimo Tour consecutivo. La etapa nació con el ataque inmediato de Joost Posthuma y Laurent Brochard. Poco después se unieron Yuriy Krivtsov, Iñaki Isasi, Luis León, Gianluca Bortolami y Mauro Facci. Las diferencias se abrían (renta máxima de 10.40). Discovery comenzó a marcar un ritmo infernal y la suerte estaba echada ante la presencia de la alta jerarquía, donde ya faltaban Heras y Beloki, amén de Mayo, que andaba perdido. A 11 kms. de meta, y una vez finalizado el trabajo de desgaste del ucraniano Popovych, llegó el zarpazo de Armstrong. Enseguida cayeron Basso, Ullrich y de manera espectacular, Vinokurov. Valverde, Rasmussen y Mancebo aguantaron. Los españoles reciben el recado del «boss» de tirar «a saco» y éstos echan una mano. Todos, conformes, llegan a la hora de la verdad. Valverde fue el más fuerte, más que Armstrong.