Su catalán es perfecto, al igual que el trato que dispensa en las distancias cortas y su conocimiento del deporte balear. Iñaki Urdangarín Liebaert (Zumárraga, 1968), duque de Palma, deportista de los grandes y desde hace un buen puñado de meses vicepresidente del Comité Olímpico Español (COE). «Me sorprendió lo que hizo el Mallorca en el último tramo de la Liga. Fue impresionante», comenta antes de iniciar la entrevista. Una hora antes, Madrid y también Palma se habían quedado fuera de la carrera olímpica. Su rostro no disimulaba el golpe de esta doble decepción. «Palma también se había volcado con la candidatura de Madrid 2012 y la verdad es que se había desarrollado un gran proyecto. Es un palo haberse quedado fuera, pero ahora se ha creado una nueva situación y hay que afrontarla. Para Palma ha sido muy bueno ir de la mano de Madrid y estar integrada en su candidatura, pero también tiene que desarrollar sus propios proyectos. Tiene capacidad».
-¿Madrid y Palma deben volver a
intentarlo?
-Conseguir organizar unos Juegos Olímpicos es casi una gesta, es
muy difícil. Ahí está el ejemplo de París, una gran ciudad que se
ha quedado fuera por tercera vez consecutiva. Ahora mismo hay que
reflexionar y analizar la situación, que es totalmente nueva. El
proyecto de Madrid, en el que también estaba incluido Palma, era
francamente bueno, probablemente el mejor, pero ha sido descartado.
No obstante, mi opinión personal es que hay que saber leer los
códigos y que Madrid debe volver a intentarlo.
-Palma ha perdido también una oportundiad excelente para
participar como nunca en unos Juegos Olímpicos.
-Está claro, aunque incido en que ahora hay que pasar página e
iniciar nuevos proyectos. Estratégicamente, Balears lo tiene todo a
su favor para seguir apostando por el deporte y los acontecimientos
de élite. Sé que se están construyendo nuevas infraestructuras y es
una excelente noticia. Siempre he pensado que sería muy interesante
apostar también de forma decidida por el turismo deportivo. Creo
que sería bueno abrir el espectro en este sentido.
-Dice que le ha impresionado la forma en la que el
Mallorca ha logrando mantener la categoría.
-Bueno (sonríe). No soy un gran aficionado al fútbol, pero debo
reconocer que su recta final de campeonado ha sido espectacular. Yo
creo que prácticamente nadie confiaba en la permanencia, pero se ha
conseguido y ha sido una satisfacción para todos. Es muy importante
para cualquier ciudad tener a un equipo en Primera División. No
tengo capacidad para hacer un análisis profundo y serio, aunque
espero que se apuntale bien el equipo y esta temporada no se sufra
tanto.
-Otra buena noticia ha sido el ascenso del Menorca a la
Liga ACB.
-También ha sido algo espectacular y algo muy bueno para la isla.
La ACB es una de las mejores competiciones del mundo y el nombre de
Menorca se proyectará en toda Europa. En el aspecto meramente
deportivo, no será fácil, aunque ojalá se sienten las bases de un
proyecto que permita al Menorca asentarse en la categoría. También
me parece que contar con un equipo en la Liga ACB es un buen motivo
más para ir a Menorca.
-Otro nombre propio: Rafael Nadal.
-Los medios de comunicación ya se han encargado de decirlo todo. Yo
quiero destacar su humildad y honestidad. Es algo que me ha
impresionado. He leído muchas declaraciones suyas, le he escuchado
muchas veces y siempre me ha impactado su humildad. Trabaja
muchísimo para ser el mejor y es obvio que estamos ante un tenista
que nos va a dar muchas alegrías. No hay dudas, estamos ante un
gran campeón.
-¿Cree que Elena Gómez, otro gran icono del deporte
balear, volverá a estar al máximo nivel?
-Tuve la ocasión de verla en los Juegos Olímpicos de Atenas, donde
la suerte le dio completamente la espalda. Fue un golpe muy duro
porque Elena llevaba muchos años trabajando para lograr una
medalla. En unos pocos segundos se fue al traste el trabajo de
muchos meses, aunque la gimnasia es una disciplina muy exigente y
la única manera de poder competir en unos JJ.OO y estar junto a las
mejores es trabajando muchísimo. Se que Elena Gómez ya no está en
Madrid y entrena en la Isla, pero también lo está haciendo a
conciencia y no me cabe ninguna duda de que pronto estará al máximo
nivel.
-Usted guarda una estrecha amistad con Pepote Ballester,
con quien compartió habitación en la Blume. ¿Suele pedirle
consejo?
-Pepote Ballester es un gran gestor, lo está demostrando, y también
ha sido un gran deportista, solemos hablar bastante, pero yo no soy
nadie para dar consejos. Creo que está haciendo un buen trabajo en
la Direcció General d'Esports. La estrecha vinculación de la
Familia Real con el mundo de la vela ha provocado que nos veamos
muy a menudo y la verdad es que es un buen amigo.
-La entrada del Menorca en la ACB ha repercutido
directamente en el patrocinio del equipo ciclista, ¿cómo valora
este cambio de estrategia del Govern?
-Balears sigue al lado del equipo ciclista, aunque pronto pasará a
convertirse en el segundo patrocinador. Entiendo perfectamene que
el Govern haya decidido involucrarse en el proyecto del Menorca en
la ACB. Los recursos economicos no son infinitos y está claro que
el Govern tiene que estar al lado del Menorca. En este caso ha
tenido que reducirse la inversión en ciclismo.
-Balears disfrutará pronto de nuevas infraestructuras
deportivas. ¿Será una referencia?
-Con el nuevo «Arena» y el centro de tecnificación de Calvià se
dará un salto de calidad importante. Después hay que optimizar
estas infraestructuras.