Efe|VITORIA
El Tau Cerámica se halla ante su última oportunidad de conseguir
mañana (Pabellón Fernando Buesa Arena, 19:00 horas) ser campeón de
la Liga ACB por segunda vez en toda su historia, aunque para
lograrlo deberá aprovechar el factor cancha a su favor frente al
Real Madrid. Tras los cuatro choques disputados hasta ahora entre
baskonistas y madridistas, con un balance de dos victorias para
cada equipo como directo resultado de la tremenda igualdad que
preside esta serie final por el título, llega ya el momento de la
verdad, y el que gane esta tarde se llevará la preciada copa para
sus vitrinas. Tanto el preparador montenegrino del equipo alavés
como sus jugadores son conscientes de que ya no hay vuelta atrás y,
por lo mismo, será preciso realizar este domingo un último esfuerzo
para poder inclinar la balanza a su favor, aunque enfrente estará
un Real Madrid compacto, muy atlético en el plano físico y con
grandes recursos, sobre todo por su gran dominio del rebote
ofensivo.
«Creo que la clave principal de nuestra derrota de ayer en el Pabellón de Vistalegre no fueron las dos técnicas señaladas a nuestro entrenador Dusko Ivanovic, sino nuestros errores en el rebote, ya que creo que en ese momento el partido estaba ya decidido a favor de nuestro rival», explico el base internacional del conjunto vitoriano, José Manuel Calderón. «Hemos trabajado durante toda la temporada para poder disputar el quinto encuentro del playoff final en casa, así que por lo menos habrá que ser positivos y pensar que nos lo jugaremos todo a una carta ante nuestros seguidores», subrayó el internacional de Villanueva de La Serena (Badajoz). Calderón también precisó que al comienzo de la actual temporada todos hubieran firmado el poder disputar el quinto partido en la pista vitoriana del Fernando Buesa Arena, algo que se logró tras haber quedado el Tau Cerámica primero de la liga regular.
«Lo principal es que todos olvidemos ya el cuarto partido de la eliminatoria final, y que pensemos únicamente en el quinto y definitivo choque de este domingo», recalcó el base baskonista. Por último, el primer responsable del banquillo vitoriano, Dusko Ivanovic, manifestó que hoy será necesario jugar «muy intensos físicamente», ya que, de no ser así, «pierdes seguro». Dusko Ivanovic dirigirá su último partido al Tau antes de que anuncie su marcha al Barcelona, con un gran balance de victorias en sus 335 partidos. El preparador balcánico del equipo alavés ha estado sentado en el banquillo del club baskonista en 170 partidos de la liga regular de la ACB, en 45 del playoff de la misma competición, en 106 encuentros de competiciones europeas y en 14 de la Copa del Rey y la Supercopa de España. En total, salen esos 335 partidos, de los que el montenegrino ha ganado 228 y ha perdido 107, con un porcentaje de victorias cercano al setenta por ciento (exactamente el 68 por ciento). Una hoja de servicios modélica en la que sólo falta la Euroliga que el Maccabi les arrebató en la final.