El president del Govern, Jaume Matas, recibió ayer en el Consolat de la Mar al presidente del Real Mallorca, Vicenç Grande, en un encuentro en el que el máximo accionista de la SAD balear le mostró las líneas maestras sobre las que se va a construir el nuevo proyecto mallorquinista. En su primer encuentro oficial con el máximo responsable del Ejecutivo autonómico, Grande planteó las iniciativas que la entidad tiene previsto poner en marcha de cara a la próxima temporada y también dejó patente la política de fichajes que seguirá el club. Hablaron de jugadores, pero el mandatario bermellón no desveló las prioridades que baraja la recién creada comisión deportiva, aunque sí aprovechó la cita para asegurar que el fichaje de Saviola está descartado.
Y es que uno de los nombres que ha sonado con más fuerza y que ha generado una mayor expectación ha sido el del delantero argentino del Fútbol Club Barcelona, Javier Saviola, que ha expresado su deseo de permanecer en la entidad que preside Joan Laporta a pesar de que los responsables azulgranas podrían estar trabajando en su salida. «Todos los buenos jugadores nos interesan, pero no podemos tirar la casa por la ventana. En el caso de Saviola, lo damos por descartado ya que ni siquiera igualando la mejor oferta accedería a venir, puesto que imagino que sus objetivos deportivos pasan por jugar en equipos con mayor potencial que el nuestro», comentó Grande.
En plena vorágine de contrataciones, el máximo accionista del Mallorca expresó su intención de fichar «rápido pero sin malgastar dinero», con el objetivo de «no sufrir» la próxima temporada y, sobre todo, para evitar que aumente el déficit presupuestario que la entidad ha generado en el último ejercicio y que sólo se subsanará si se producen traspasos. En cualquier caso, el presidente y máximo accionista también adelantó que la entidad estaba dispuesta a arriesgar y, por consiguiente, realizar inversiones que puedan resultar interesantes. El dinero no representará un obstáculo insalvable, según se desprende de las manifestaciones de Grande, que aboga por una dinámica de trabajo ambiciosa, en la que no se pierda la cabeza, pero que tenga la capacidad para construir una base sólida para una SAD que realizará los movimientos oportunos para conseguir la financiación que sea necesaria. Asimismo Grande admitió que habló de jugadores con el presidente Matas: «El me citó varios nombres de futbolistas que le agradaría ver en el Mallorca y yo hice lo mismo, pero una cosa son los deseos y otra la realidad». No en vano los despachos de Son Moix acumulan ofertas y se ha abierto la fase de planificación. El trabajo reside ahora en estudiar las posibilidades que sean capaces de satisfacer las pretensiones del entrenador Héctor Cúper en sintonía con la capacidad de las arcas bermellonas, pendientes de poder cerrar algún traspaso.