En plena vorágines estival, con el mercado funcionando a pleno rendimiento, el Aqua Mágica Palma 2005/06 no pierde el tiempo. Directiva y técnicos se han puesto manos a la obra y el nuevo proyecto ya echa a rodar. Eloy Doce ya dispone de sus primeros efectivos. La pintura ha sido una de las prioridades, y el primero en firmar ha sido Shalawn Miller. El ala-pívot se ha comprometido por espacio de dos temporadas y conoce a la perfección la LEB tras sus pasos por Cornellà y Valls, con el que logró el milagro de la permanencia el pasado curso. Promedió quince puntos, siete rebotes y casi tres asistencias por partido, y el hecho de poseer pasaporte español le permite ser un comodín dentro de una plantilla en la que está llamado a ser uno de los pesos pesados.
Pero aquí no se detiene la maquinaria del Aqua Mágica. Miller no estará sólo bajo los tableros, pues la entidad tiene caso atado el fichaje de uno de los hombres más resolutivos de la liga argentina. El también estadounidense Robert Battle, siete veces MVP de la jornada en la Liga Nacional A, hizo del Conarpesa un grande y le llevó lejos en las series por el título. Junto a Ryan Perryman formó una de las parejas estadounidense más temibles y quiere dar el salto a Europa de la mano del club presidido por Miquel Ramis.
Miller tiene todos los números para ser la figura de este Aqua Mágica. Elegido para el mejor equipo defensivo de la NCAA en el curso 2001/02, es un buen taponador. Sus 204 centímetros y la contundencia de su físico le llevaron a pasar de México a Argentina y dar así un salto de calidad en su carrera que puede vivir su culminación aterrizando en España, donde se espera mucho de un hombre que en Conarpesa ha acaparado los elogios y que contaba con muchos pretendientes en la LEB.