«¿Estaría dispuesto a jugar en Segunda?» Esta se ha convertido en la pregunta de moda en la sala de prensa de la Ciudad Deportiva. En las últimas semanas, con la salvación cada vez más lejos, todos los jugadores que han desfilado por la pasarela de Son Bibiloni han recibido el mismo dardo. Y todos, sin excepción, han abierto la puerta de su continuidad...en Segunda División. El último de ellos fue el sevillano Poli Fernández. A apenas dos meses para finalizar su compromiso con el Mallorca, que concluye el próximo 30 de junio, el lateral zurdo se mostró ayer dispuesto a seguir en la Isla. Es más, incluso no renunció a una rebaja de su ficha «si el proyecto de la próxima temporada me ilusiona».
Poli es uno de los tres jugadores (junto a Marcos y Correa) que finaliza contrato el próximo 30 de junio. El club le propuso renovar hace unos meses, pero su representante no alcanzó ningún acuerdo y decidieron posponer las conversaciones. En los últimos días, sin embargo, han aparecido informaciones que vinculan el futuro del lateral izquierdo, de 28 años, al Getafe, al club en el que se formó, el Betis, e incluso al Sevilla.
El futbolista negó ayer cualquier tipo de vinculación escrita con algún club: «Es falso que yo ya haya firmado para la próxima temporada con otro equipo. Hasta el 30 de junio soy jugador del Mallorca y después, ya veremos a ver qué sucede. No creo que ahora sea el momento para hablar de estas cuestiones». Poli no dudó, sin embargo, cuando se le preguntó si estaría dispuesto a jugar en Segunda División: «Claro que sí. He jugado cuatro temporadas en Segunda, con el Extremadura, y la Segunda fue mi trampolín para venir al Mallorca».