Es Iuliano un tipo con una hoja de servicios extensa, granada de títulos. Ha masticado competiciones de gran calado y ha actuado durante un buen manojo de años en la liga más exigente del planeta, la italiana. Llegó a España con el objetivo de sanar a un enfermo como el Mallorca, pero apenas ha podido jugar dos partidos de forma consecutiva. Le han maltratado las lesiones, pero también los árbitros. Expulsado en su estreno ante el Real Madrid, el pasado domingo también acabó en la ducha tras una entrada sobre Gronkjaer en el minuto 77. Iuliano se marchó muy irritado del Manzanares, y ayer vomitó toda su ira: «El arbitraje fue sufrimos el domingo fue una vergüenza».
Asegura el central que en Italia los colegiados están escrutados al milímetro, que en los medios se analizan cada uno de sus movimientos, pero que, desde que ha llegado a nuestro país, todavía no ha encontrado un arbitraje digno: «Juro que nunca vi árbitros tan malos como los dos anteriores -González Vázquez en el Calderón y Pino Zamorano ante el Sevilla-, es una vergüenza. En Italia critican muchos a los árbitros pero lo que vi los últimos domingos, como en el Barcelona-Betis, es demasiado», indicó Iuliano en un entendible castella- no. El jugador transalpino criticó la pobre preparación física que tienen los árbitros de la Liga porque, según Iuliano, sigue el juego desde lejos y apenas entran en contacto con las jugadas. El futbolista del Mallorca fue más allá y recomendó que alguien ataje la actual situación que está viendo nuestro campeonato: «Todos tienen ojos para ver lo que pasa en una cancha, en Italia son muy críticos, pero aquí en España tienen que hacer algo porque no es posible que estén tan lejos de la acción, siempre de espaldas, es que no lo he visto nunca. A lo mejor necesitan gafas», agregó.
El zaguero también quiso ser realista y no ocultó que la actual situación que vive el Mallorca no es exclusivamente problema de los arbitrajes, pero pidió que las decisiones de los colegiados no afecten además al rendimiento del equipo: «Es cierto que no perdemos por eso, pero si además hay cosas externas que no podemos controlar...». Mark Iuliano se perderá el encuentro del próximo domingo ante el Zaragoza por sanción, algo que agrava la situación que vive el equipo, que también se va a quedar sin Sergio Ballesteros. El que sí que podrá actuar es Guillermo Pereyra, que sólo acumula cuatro amonestaciones y no cinco, tal y como pensaba Héctor Cúper después de la cita en el Calderón. Así pues, el centrocampista argentino podría ser reconvertido a central y actuar en esa demarcación ante el conjunto aragonés debido a las múltiples bajas en defensa.