C.Román
La cantera del fútbol balear se enfrenta hoy a un doble desafío que
le puede reportar una de las mayores alegrías de su historia. Las
selecciones cadete y juvenil quieren culminar un Campeonato de
España inmaculado y tienen la ocasión de hacerlo en casa y en unas
condiciones muy favorables. A los dos equipos les bastaría con
sumar un solo punto en su enfrentamiento de hoy ante Catalunya para
oficializar su ingreso en la fase final del torneo y poder pelear
por el título nacional en una final a cuatro frente a las
federaciones más destacadas del país.
La primera cita de la jornada trasladará la acción al campo Antonio Quetglas de Santa Margalida, donde el combinado sub'16 recibirá la visita de la selección catalana a partir de las 11.30 horas. El equipo dirigido por Javier Herreros, que hasta el momento ha conseguido imponer sus credenciales en todos los partidos que ha disputado, encara el choque más importante de los últimos años con la moral por las nubes después de su abultada victoria sobre Galicia (4-1).
En ese partido, los isleños tuvieron que hacer frente a varias adversidades, pero supieron salir con éxito de todas ellas y eso les puede beneficiar en el aspecto anímico. Fueron capaces de asimilar un gol en contra en el primer minuto y acabaron goleando, un detalle que evidencia su capacidad de sacrificio y la calidad que habita en sus filas.