Toni Colom se quedó el martes sin opciones de luchar por la general de la Challenge Vuelta a Mallorca, pero ayer evidenció que también sabe sacrificarse por el bien del equipo. Se demostró así mismo que puede tener un papel protagonista en el Illes Balears y realizó todo el trabajo para que Alejandro Valverde ganara la etapa en el Port de Sóller y sentenciara la carrera. La conclusión del de Bunyola es contundente: «tenemos un superequipo».
«Ya lo dije el martes: tenemos un superequipo. El equipo está muy bien. Hemos vuelto a demostrar que podemos defender, atacar y ganar. A veces sólo se pueden defender, pero nosotros a estas alturas del año lo podemos hacer todo» afirmó Toni Colom al término de la cuarta etapa.
Su resumen sobre los 150 kilómetros que recorrieron ayer fue que «hemos llevado toda la etapa muy bien controlada. He hablado con Alejandro en la última subida. Me ha preguntado qué tal iba y le he dicho que me encontraba muy bien después del pajarón de ayer -por el martes- y cuando hemos empezado la última parte de la subida yo quería arrancar pero él me ha dicho que mejor pusiera un ritmo fuerte. Me he puesto a un ritmo lo más agresivo que podía, de menos a más, y de todo el grupo que íbamos hemos quedado sólo tres corredores lo que demuestra que estoy bien de forma. Al final bajando noshemos quedado los dos solos, pero no hemos podido llegar a meta».