El filial acude al peor escenario posible para recuperarse. El segundo equipo mallorquinista tiene la obligación de empezar a solucionar sus problemas en territorio ajeno y se cruzará este mediodía con un Real Madrid B que lidera la categoría de forma solvente y autoritaria. Los baleares, que tienen la frontera de la salvación a siete puntos, no pueden regresar a la Isla con las manos vacías y afrontan otra prueba de supervivencia dispuestos a dar un paso al frente (Ciudad del Fútbol, 12.00 horas). La derrota de la pasada semana ante el Fuenlabrada ha dejado al Mallorca B en una situación precaria. El equipo se ha acostumbrado a soportar sobre sus hombros el peso de la clasificación y está empezando a pagarlo en el aspecto anímico. Le cuesta evolucionar y se ha distanciado en exceso de algunos de sus rivales más directos. Además, se adentra desde hoy en una de los tramos más empinados de su travesía particular y el tiempo se ha convertido en su principal enemigo.
El entrenador del conjunto rojillo, Toni Cazorla, ha desplazado a 16 jugadores a la capital de España con el objetivo de sorprender al poderoso filial madridista y en la lista se observan algunas novedades importantes. En ella se encuentran las dos incorporaciones del equipo en el mercado de invierno, Yohan Cavalli y Guzmán Casaseca, que podrían disputar su primer partido como mallorquinistas. El primero es un joven mediapunta francés que procede de la Segunda División gala y el segundo era hasta hace muy poco la joya de la cantera del Badajoz. Ambos llegan para aportar calidad y frescura en los metros finales, porque hasta el momento el filial sigue siendo el equipo con menos mordiente de la categoría.En la lista de los bermellones vuelve a aparecer además el juvenil Oliver, aunque Busi (sancionado), Víctor y Rigo (lesionados) se han quedado en Palma y no podrán contribuir al despegue de los isleños. Tampoco estará Xisco Cladera, que ha sido cedido al Badajoz hasta final de temporada y que debutará este fin de semana en el grupo IV frente al Algeciras. Enfrente, el grupo de Cazorla tendrá a uno de los filiales con más recursos del fútbol español. El Madrid B aglutina en sus filas una calidad notable y será un conjunto díficil de doblegar, aunque por sus características, el cuadro isleño podría sentirse más cómodo que ante otros rivales. La escuadra blanca, dirigida por el ex técnico del Mallorca B Juan Ramón López Caro, cuenta en su vestuario con jugadores de la talla de Roberto Soldado -máximo goleador del grupo con 13 tantos-, Àlvaro Arbeloa, Javi García, Jurado o Juanfran. Todos ellos han hecho efectivo su debut con el primer equipo y encarnan una seria amenaza para el delicado sistema defensivo de los insulares. De hecho, de los diez partidos que ha completado como local el conjunto madridista ha ganado siete, ha empatado uno y ha cedido dos, el último de ellos ante el Celta B (1-4) hace sólo un par de semanas. El encuentro, que será dirigido por el colegiado Hermosilla Alaña, se podrá ver en Mallorca a través de Real Madrid Televisión.