Una de las iniciativas más ambiciosas que la Direcció General d'Esports ha planificado para el 2005 es la puesta en marcha de tarjeta federativa, un documento que aunaría una función bancaria y la de licencia deportiva. El proyecto está en marcha y ayer lo expuso Pepote Ballester ante los presidentes de los diferentes entes federativos, citados en Príncipes de España. Hasta el momento, tres entidades bancarias -Sa Nostra, La Caixa y CAM- han mostrado su interés por esta iniciativa, que se adjudicará por concurso público. De cada operación de compra o de cualquier calibre que se realice con la tarjeta, una pequeña parte se destinará a la federación a la que pertenezca el titular. Con ello, se persigue una nueva vía de financiación para estas entidades.
La tarjeta podría lucir los logotipos de las federaciones territorial y nacional, y llevarían consigo un seguro de responsabilidad civil en viajes del que podrían ser beneficiarios directos los cerca de noventa mil deportistas federados de Balears. El encuentro con los presidentes sirvió además para clarificar algunos puntos que atañen al Pla Esportiu 2004-2008 y que se concentran en las áreas de Tecnificación y Alto Rendimiento.
A lo largo de la reunión, se dieron a conocer las cinco líneas maestras de subvención que el Govern desarrollará. Éstas comprenden los capítulos de material deportivo, acontecimientos, Campeonatos de Balears, desplazamientos a la Península e interinsulares. De la misma manera, Pepote Ballester dejó ver la posibilidad de realizar algunas variaciones en la Ley del Deporte a nivel territorial.