Daniel Zamora|LOS ANGELES
La sorpresa volvió a darse dentro del tenis femenino cuando la
joven revelación rusa Maria Sharapova se aprovechó de una lesión de
la estadounidense Serena Williams para vencerla por 4-6, 6-2 y 6-4
en la final del Masters femenino que se disputó en el Staples
Center de Los Angeles. Sharapova, de 17 años, que también había
dado la gran sorpresa al ganar este año a Williams en el torneo de
Wimbledon, superó una desventaja de 1-2 en el segundo set, 0-4 en
el tercero y un lapso mental para hacer seis juegos consecutivos
después que Williams se lesionó en el abdomen. El triunfo permitió
a Sharapova pasar del sexto puesto al cuarto en la clasificación
mundial, ganar su quinto título del año, incluido el de Wimbledon,
y llevarse un premio de un millón de dólares y un coche deportivo,
que entregará a una organización benéfica.
«Es increíble lo que he conseguido esta noche -por ayer- porque después de estar abajo 0-4 en el tercero era muy difícil pensar que podía volver a recuperarme y ganar», declaró Sharapova. Mientras que Williams, 23 años, que finalizó la temporada, como séptima del mundo, logró una marca de 39-9, y por primera vez desde el 2001 se fue sin haber logrado ningún título de Grand Slam ni Masters desde el 2001. Williams por llegar a la final del Masters se ganó un premio de 500.000 dólares, lo que fue motivo para que mostrase su buen humor, a pesar de haber perdido, al decir que no era lo que había ganado Sharapova, pero que invirtiéndolo bien podría convertirlo en un millón. «No tuve suerte con la lesión, pero le doy gracias a Dios por toda ayudarme a terminar el año de manera positiva y también felicito a Sharapova porque luchó y mereció ganar el título», destacó Williams.
El partido tuvo dos historias muy diferentes, la primera que se dio antes de la lesión de Williams, que ocurrió en el segundo set y luego cuando Sharapova se descontroló por completo para reaccionar a tiempo y aprovecharse de la debilidad física de su rival.