Cuando Héctor Cúper hizo las maletas y se embarcó rumbo a su aventura en Valencia, Son Moix era un hervidero de albañiles y electricistas, fontaneros y pintores corriendo de un lado a otro para dar los últimos retoques al estadio y entregar la obra a tiempo. El entrenador argentino se marchó de la Isla en plena mudanza del vetusto Lluís Sitjar al nuevo recinto, inaugurado en ese verano de 1999 con motivo de la Universiada. El próximo domingo, casi cinco años y medio después, Cúper se estrenará en Son Moix como entrenador de un Mallorca en descenso en la Liga y eliminado de la Copa. La expedición mallorquina regresó ayer de Lanzarote después de un viaje de vuelta maratoniano. Cúper cerró el libro de la Copa el pasado miércoles, nada más finalizar el choque, y en la sesión celebrada en tierras canarias ya repartió el guión del partido del próximo domingo ante el Atlético de Madrid.
Cúper vivió los primeros movimientos de tierra en el Camí dels Reis. El entrenador argentino visitó las obras de Son Moix en enero de 1999, unos meses antes de su inauguración. Pero jamás se sentó en el banquillo local. Al cierre de esa campaña 98-99, el argentino se fue al Valencia. Con el equipo ché visitó Son Moix el 7 de noviembre de 1999 en un partido que acabó en victoria mallorquina gracias a un gol de Diego Tristán. En la siguiente campaña, el Valencia no dobló la rodilla, pero al menos rascó un punto (2-2). El grupo balear recibe al equipo colchonero, un rival que se le da bien a Cúper (ver apoyo), con el objetivo de sellar el primer triunfo de la temporada en casa, donde no gana desde el pasado 16 de mayo. Desde aquel triunfo ante el Espanyol en la penúltima jornada de la pasada campaña (4-2), el grupo balear ha sellado el peor arranque liguero de su historia como local, con sólo un punto de los 15 posibles. El empate ante el Villarreal es un islote en medio de las derrotas frente a Real Madrid, Málaga, Barcelona y Racing de Santander, cuatro rivales que han hurgado en la herida bermellona.
Cúper tirará de nuevo del equipo más titular para tratar de completar el atisbo de mejoría mostrado el pasado domingo en el estadio Sánchez Pizjuán. Ballesteros, Farinós, Jorge López y Juan Arango desfilarán por el once inicial después de descansar frente al Lanzarote. El técnico, asimismo, recupera a Fernando Niño, sancionado ante el Sevilla, aunque seguirá sin poder contar con los lesionados Patrick Müller, Marcos Vales, Miquel Angel Moyà y Andrija Delibasic. Aunque la tempranera eliminación en el torneo del K.O. ha echado tierra en el fuego de la hinchada, las perspectivas del club apuntan a un ambiente de gala. «Como mínimo esperamos 18.000 espectadores, aunque yo confío en llegar a la barrera de los 20.000». Así de confiado se mostró el jefe de taquillas del club, Pep Calvo, porque el regreso de Cúper ha «animado a la gente». El Atlético llegará mañana a la Isla con la duda de su estrella Fernando Torres, que arrastra molestias.