Efe|CALVIÀ
Ucrania consiguió la medalla de oro, Rusia la de plata y Armenia la
de bronce, mientras que España se clasificó en décimo lugar después
de la última jornada de la XXXVI Olimpiada de Ajedrez que se ha
disputado durante las últimas semanas en el Gran Casino de
Mallorca. Rusia, y antes la URSS, no habían perdido el oro desde
que en 1978 lo ganó Hungría en Buenos Aires. Ucrania, con el genial
Vassily Ivanchuk, el ex campeón del mundo Ruslan Ponomariov, y los
sólidos Andrei Volokitin, Alexander Moiseenko, Pavel Eljanov y
Sergei Kariakin se pusieron en cabeza desde las primeras rondas y
no la abandonaron.
Hay que destacar en Ucrania la magnífica actuación de Kariakin que, con catorce años, ha conseguido 6,5 puntos de siete. España quedó clasificada en el décimo lugar pese a la dificultad para resolver algunos desempates debido a la complejidad del sistema Bucholz que se emplea para aclararlos. Ayer, vencieron con facilidad al débil equipo de Ucrania por 3,5 a 0,5. Lo único extraño fue el rápido empate de Julen Arizmendi con el finlandés Riku Molander en 28 movimientos y dos horas de juego. Aparentemente, hay que esperar a los análisis posteriores, estaba algo mejor de posición.
Alexei Shirov, Paco Vallejo y Miguel Illescas no tuvieron grandes dificultades en derrotar a Tomi Nyback, Mika Karttunen y Heikki Lehtinen, respectivamente. Esta victoria, que lleva a España al décimo lugar, encubre una regular actuación de la escuadra española, séptima cabeza de serie, que tenía que haber aspirado a medalla teniendo en cuenta la ventaja de jugar en casa. Cuba ha sido el equipo revelación de la Olimpiada. Ayer empataban con Israel, 2-2, y se han clasificado en el séptimo lugar. Lenier Dominguez, Lázaro Bruzon, Neuris Delgado, Jesús Nogueiras, Walter Arencibia y Yuniesky Quezada, son un equipo compacto mezcla de juventud y veteranía.