C.M.O./Efe
España se atasca en el momento decisivo, cuando los equipos piden
turno para la gloria. Sin tiempo para digerir la primera derrota de
la XXXVI Olimpiada, que le infringió el sábado el combinado indio
que lidera Viswanathan Anand, la selección nacional dobló de nuevo
la rodilla ante Estados Unidos, un cuarteto formado íntegramente
por jugadores de origen soviético, por un sonrojante 3.5-0.5. Las
secuelas de la segunda derrota española en Calvià le aparta
bruscamente del podio. Antes del duelo, la selección figuraba en
una séptima plaza que invitaba al optimismo. Con la novena ronda
encuadernada ya en el resumen, España divisa el éxito desde una
posición (27º) cargada de pesimismo.
En una tarde negra de los cuatro tableros nacionales, Miguel Illescas evitó el «rosco» al hacer tablas con el estadounidense Alexander Goldin. El primer tablero, Alexei Shirov, jugó una partida de las suyas. Complicada desde la apertura, una española o de Ruy López. Su contrario, Alexander Onischuk, 44 del mundo, jugó con frialdad, paró las amenazas y quedó en una posición muy superior por lo que Shirov tuvo que abandonar. Es la primera partida que pierde en esta Olimpiada.
El menorquín Paco Vallejo, con negras, también sufrió su primera derrota y también con un adversario, Alexander Shabalov, inferior sobre el papel. Fue una partida estratégica muy bien llevada por el estadounidense. Era de esas posiciones que no le gustan al español que además, se fue cargando de tiempo y tuvo, finalmente, que inclinar su rey en señal de abandono. Illescas, que fue el último en acabar, hizo tablas ya que Alexander Goldin que tenía pieza de más, tuvo que acudir a los jaques continuos. El español tenía tres peones pasados que no había forma de parar.