Al mal tiempo, buena cara. Benito Floro roció de humor su comparecencia semanal, una cita con los medios que llega en plena tormenta, con el equipo en la cola de la clasificación y con su futuro acaparando titulares. El entrenador del Real Mallorca, que aprovechará este fin de semana de descanso para pasar unos días con su familia en Valencia, se mostró satisfecho por el trabajo realizado durante la semana y confiado en iniciar la escalada dentro de ocho días con la visita del Villarreal, su ex equipo, a Son Moix.
Floro finiquitó su cita mediática con una broma al ser preguntado por su conversación mantenida anteayer con la alcaldesa de Palma, Catalina Cirer, en la inauguración de la exposición retrospectiva del Mallorca. «Me alegró conocerla personalmente porque es una persona muy futbolera y muy simpática. Tuve la oportunidad de pedirle que hiciera todo lo que pudiera para que pronto el club tenga un estadio precioso dedicado exclusivamente al fútbol para que la afición esté próxima al futbolista. Ella me dijo que lo hará cuando juguemos con dos puntas», soltó el técnico ante la risa de los presentes: «Así que cuando empiecen las máquinas a trabajar, pondremos tres puntas, no dos» sentenció.
Antes de ese epílogo humorístico, Benito Floro analizó el presente: «El trabajo se ha centrado esencialmente en mejorar los fallos puntuales que estamos teniendo, que no son otros más que la finalización de la jugada en área rival y las acciones a balón parado y en algún que otro contraataque en la nuestra. Los rivales nos crean los problemas en saques de banda, en golpes francos y en alguna que otra contra cuando nuestro equipo está dominando en su campo. Hemos trabajado en mejorar la coordinación defensiva para que no nos sorprendan a la contra ni a balón parado», concretó el técnico.
El entrenador gijonés lanzó un dardo a la defensa: «Nuestra línea de atrás es poco carismática para dar órdenes y necesitamos que salga esa comunicación, que se escuche a alguien para poder corregir rápidamente los errores ante cualquier adversidad».
El movimiento sísmico provocado tras la derrota en Levante no le ha alterado su línea de trabajo: «Los que me conocen saben que no voy a salto de mata. Propongo un camino y ante los inconvenientes propongo más intensidad en la búsqueda de ese camino. Pero el fútbol ya sabemos como es. No hay que darle más vueltas. Los profesionales tenemos que estar concentrados en lo que queremos hacia el final, sabiendo que al principio puede ir bien y no confiarse o puede ir mal y no asustarse».
El entrenador bermellón piensa en positivo: «No me gusta que me transmitan confianza por hechos concretos, que me ratifiquen y todo eso. Yo lo único que quiero es lo que ha hecho el presidente: darme la oportunidad de entrenar a este club, dejarme las instalaciones y los futbolistas a mi disposición, respetar mi trabajo, preguntarme en todo aquello que considere que tiene dudas y partir de ahí debe ser el equipo en el terreno de juego quien le dé las respuestas».
Benito Floro no cree que la ansiedad perjudique al grupo. Más bien todo lo contrario: «Puede ser que una situación difícil como la actual sea un estimulante para incrementar las mejores y al mismo tiempo sea una vacuna para evitarlas después. Tened presente siempre que las cosas son como acaban no como empiezan. Empezar bien no es garantía de que acabes bien y empezar mal no es seguridad de que vas a acabar mal, pero sirve para vacunarte, para poner todos los remedios que a lo mejor te posibilitan avanzar con más seguridad y llegar al tramo final como hay que hacerlo».
La polémica nacional de la semana, la arenga de Luis Aragonés al internacional Reyes, también pidió turno en Son Bibiloni: «Me parece desagradable que los medios de comunicación no tengan ese sentido de la responsabilidad porque en el terreno de juego los entrenadores decimos palabras malsonantes con la intención de motivar a los profesionales. Es un tono de nuestra jerga futbolística, que no es académica pero es así, que se extrapola fuera y, sobre todo, si esa frase tiene un contenido que se puede utilizar en el plano negativo que no corresponde con la realidad de los sentimientos, para mí es una irresponsabilidad y una incorrección».
Floro se solidarizo con el selecionador: «Luis no ha querido meterse con nadie, sólo motivar a un futbolista, y si eso no se graba ni se dice a Reyes le queda como una nota simpática. Los hombres de fútbol utilizamos cualquier frase, cualquier detalle que no lleva más enfoque que el de motivar. Sí, por supuesto que de vez en cuando utilizo alguna que otra frase incorrecta sacada de contexto».