Seis jornadas ha tardado el nuevo Sóller en darse a conocer al resto de equipos de la Tercera balear. Un fútbol alegre, un marcado caracter ofensivo y un plantel provisto de la experiencia necesaria para moverse con soltura por la categoría definen al conjunto de Miquel Bestard, que tras su última y convincente victoria sobre el Montuïri se ha encaramado a la azotea del grupo isleño para agarrarse por primera vez en lo que va de liga al liderato.
El Sóller ha apostado por el ataque y hasta el momento su causa está siendo la más efectiva del campeonato. Además de contabilizar cuatro victorias en sus seis actuaciones, ha superado hasta en 17 ocasiones la puerta contraria y aunque también ha encajado diez goles, el público de Can Maiol agradece el riesgo de sus planteamientos y su obsesión por la portería del enemigo. «Yo soy el primer espectador de mi equipo», argumenta su técnico.
Bestard asegura que «construyo el once a mi medida, como a mi me gusta. Jugamos sólo con dos puntas natos, pero tenemos siempre a jugadores incisivos en la bandas y gente que llega muy bien desde atrás», apunta el preparador al definir los rasgos de su formación. «Nuestro juego es abierto y buscamos siempre la portería rival porque creo que tenemos la capacidad suficiente para hacerlo».