Pau Gasol, ala-pívot de los Grizzlies de Grizzlies y líder de la selección española, ha entrado en sus primeros Juegos cargado de «ilusión y esperanza» por colgarse una medalla, un sueño que afronta sin caer en la euforia desatada entre los aficionados después de los excelentes resultados del equipo hispano en su preparación olímpica. «Tengo ganas, ilusión y esperanza. Todos estamos ilusionados, pero no tanto como los aficionados. Nos hemos demostrado que somos capaces de batir a rivales importantes como Argentina, Serbia y Grecia, pero en un pabellón con quince mil personas apoyándonos. Aquí vamos a jugar sin nadie que nos apoye», indicó Gasol al término del primer entrenamiento de España en el Helleniki Sports Complex.
El jugador de los Grizzlies vive con intensidad su estreno olímpico dentro y fuera de la cancha y mañana desfilará con el equipo español en el estadio de OAKA: «Estaré en la inauguración. Me hace ilusión desfilar al menos una vez en la vida. Hay que estar tres o cuatro horas de pie, pero merece la pena. Es una cosa para contar cuando sea mayor».
«Yo voy a salir a jugar como en todas las competiciones, a intentar ganar todos los partidos, con ambición y con fuerza. Nada más. Vamos a ver qué tal empezamos. Hay que marcar nuestro ritmo desde el principio y si sacamos un buen resultado en los dos o tres primeros partidos tendremos mucho ganado. Luego, una vez en cuartos, con tres días de descanso, ya veremos cuál es el rival y a por todas», añadió Gasol.