La primera prueba puntuable para el Campeonato de Balears de montaña de automovilismo volvió a congregar a los aficionados en las cunetas de Andratx. Gracias al apoyo de su consistorio y a la capacidad organizativa de la Escudería Drach, se celebró a lo largo del fin de semana la undécima edición de la Pujada Castell de Son Mas, una clásica que sirvió para coronar de nuevo a Nadal Galiana, que a los mandos de su incombustible Ford Escort Crosworth marcó la pauta tanto el sábado como el domingo y obtuvo una más que cómoda renta sobre sus perseguidores.
Durante las dos primeras tandas de entrenamientos, Galiana ya avisó de sus intenciones, batiendo en la primera de ellas a Gabriel Mascaró (2:22,071), mientras que Sebastià Clar que quedaba un segundo más lejos del gran dominador de la prueba, y parece ser que del Campeonato. El guión de la Pujada no varió en exceso durante la segunda tanda, en la que Nadal Galiana repitió primera plaza, aunque con un menor margen de maniobra, pues apenas poco más de tres décimas le separaron del segundo clasificado, un Sebastià Clar que remontaba posiciones en la clasificación.
En los minutos previos a la salida oficial, la tercera manga de entrenos no sirvió para cambiar la historia de la carrera. Todo apuntaba a un duro pulso por la segunda plaza entre Gabriel Grau (Drach) y Esteban Payeras (Illes Balears), separados por entonces por únicamente poco más de una décima de segundo. Con todo preparado para el inicio de la carrera, los pronósticos apuntaban hacia un único frente. Nadal Galiana copaba todas las atenciones, pero sus rivales no estaban dispuestos a dejarle la victoria en bandeja.