El Atlètic Balears ha llegado a un acuerdo para solventar uno de los asuntos que más problemas le ha acarreado en los últimos tiempos. La entidad blanquiazul estableció ayer las bases de un convenio que le permitirá abandonar de manera definitiva el anexo del Estadi Balear y trasladar a sus equipos de las categorías inferiores a las instalaciones de Son Malferit. El acuerdo se rubricará antes del próximo 30 de junio y todos los equipos atléticos jugarían en el recinto de la Soledat a partir del curso que viene.
El presidente de la entidad palmesana, Miguel Àngel Gómez, se reunió en la jornada de ayer con el regidor de Deportes del Ajuntament de Palma, Rafael Durán y con una representación de los clubes que actualmente están instalados en Son Malferit: Relojería Calvo, Soledat y el Carpintería Peralta de fútbol de empresas. La predisposición de todos los implicados es buena y las conclusiones que pueden extraerse de este primer encuentro son satisfactorias. El siguiente paso no es otro que el de formalizar el acuerdo, un proceso que se llevará a cabo en un plazo máximo de varias semanas, ya que los clubes deben realizar la inscripción de sus equipos de cara a la próxima campaña y deben conocer cual será su ubicación para toda la temporada.
El acuerdo responde a unos contactos que se iniciaron durante el mes de septiembre del año pasado -Catalina Cirer visitó personalmente el Estadi Balear para interesarse por su situación- y contempla una serie de mejoras importantes que afectarán de lleno al aspecto de las instalaciones. De esta forma y dentro del plan de adecuación de campos de fútbol sobre el que trabaja Cort, se efectuarán varios pasos que incluyen la remodelación de la zona de vestuarios, la iluminación y el acondicionamiento general de las instalaciones, ya que el volumen de personas que pasará por el campo aumentará considerablemente y resulta preciso acicalarlo.