El acuerdo del pleno del Congreso sobre la presencia de selecciones autonómicas en competiciones deportivas internacionales, y matizado por el presidente del CSD, Jaime Lissavetzky como «no oficiales», no genera dudas en el seno del deporte balear. Buena parte de los presidentes requeridos por esta redacción tiene claro que la selección española es la única que tiene potestad para representar a la región o al país, aunque si se solicita su concurso, y a modo de competición amistosa, no descartan la opción de poder competir con otras naciones, pero siempre dentro del marco protector de la legislación deportiva.
El director general d'Esports, Pepote Ballester, tuvo la oportunidad de entrevistarse con el secretario de Estado para el Deporte y, aunque «no nos ha presentado un programa firme, sabe que estas acciones políticas se debían haber controlado». Ballester tiene claro que «hay sentencias que no permiten competir a las selecciones autonómicas o territoriales. Hay cosas más importantes que estos asuntos, y por lo que sé, en Balears no ha habido nunca intención de crear una selección profesional. Seguro que ningún presidente estará a favor, pues supone ir contra la ley, pese a que todos podemos interpretar que el Gobierno se ha alineado con los partidos que las quieren», añadió.
La consellera de Presidència i Esports, Rosa Puig, lamentó que la «hipoteca de las minorías» haya obligado al PSOE a votar a favor una iniciativa nacionalista para que se promueva que las selecciones autonómicas puedan participar en competiciones internacionales. Puig reprochó al PSOE que dañe al deporte por tener obligaciones con partidos nacionalistas en el Congreso, favoreciendo acuerdos que pueden desencadenar en «absurdos», como es «que en el extranjero veamos jugar a Balears con el País Vasco. Ni ellos mismos saben lo que han votado. Sólo puede ser la selección española la que represente al Estado», señaló Puig, quien recordó que existe una sentencia del Tribunal Constitucional que ya así lo dice. «El PSOE está creando confusión en un tema muy importante para justificar el apoyo que tiene de las minorías», comentó.
Entre las federaciones más potentes, la de baloncesto respalda este posicionamiento. Su presidente, Jaume Estarellas, afirma que «España es la que debe representarnos en torneos oficiales, es la única selección que reconocemos. No creo que los organismos internacionales acepten otras alternativas, pues si abrimos la veda, puede haber graves problemas deportivos a nivel estatal».
Particularidades
De la misma manera, explica que los combinados territoriales «están
para competir a nivel de Campeonatos de España. A nivel oficial, ni
pensarlo de momento, a no ser que se clarifique el asunto.
Entonces, deberíamos sentarnos y hablarlo con calma, aunque
supondría desmembrar al deporte español», añadió el veterano
dirigente mallorquín.
Una de las más afectadas ha sido la Federación de Patinaje. Sebastià Rico es su rostro visible en Balears y aclara que Balears ha competido «con un equipo propio ante otras naciones como Chequia o México. Era en el Ciutat de Palma y en eventos incluídos en el calendario, pero de exhibición. No sé si cambiará el parecer de la Internacional, pero en su día se aprobó que Cataluña fuera al Mundial de hockey sobre patines y no me parece correcto todo lo que está pasando».
Una de las pioneras a nivel de equipos territoriales fue la Federación Balear de Rugby, que mantiene su propio equipo, «pero compitiendo en un evento continental amparada por todos los estamentos. Fuera del marco regional, hay una selección española a la que todos nos debemos», comenta su presidente, Diego González. Pau Verd, presidente de la territorial de atletismo, tiene muy claro que apoyará «la postura de la RFEA. Nunca hemos pensado en competir fuera de su legislación, aunque a nosotros parece no afectarnos mucho. La selección española es la nuestra», dijo. El mundo del ciclismo no está al margen. Andreu Canals dice que «si legalmente se da la posibilidad, hay que estudiarlo, pero es una opción muy lejana».