Samuel Etoo ha estallado ante las acusaciones que se están vertiendo desde Barcelona. Aburrido y harto de los comentarios que viene realizando Luis Fernández en los últimos días, el jugador camerunés reclamó ayer la palabra para exponer su punto de vista y cargar duramente contra el técnico de Espanyol. «A mí me pagan para ganar y el que no esté contento que le den por culo», señaló el africano en alusión a las declaraciones del entrenador galo. El delantero quiso zanjar así una polémica que podría reavivarse en las próximas horas y se despachó contra las continuas quejas procedentes de Montjuïc. Etoo se encontraba especialmente molesto por la espiral de comentarios que originó el triunfo del Mallorca sobre el Espanyol (4-2) y citó a los medios de comunicación presentes en la Ciudad Deportiva Antonio Asensio para transmitirles su postura. El punta compareció en rueda de prensa después de realizar una sesión de recuperación en el gimnasio y pese a su aspecto relajado se intuía que iba a hablar claro.
«Sé que los compañeros del Espanyol están mal, pero peor están Celta o Valladolid. Está claro que nadie va a regalar nada a nadie y cada uno está donde está por méritos propios», apuntó. Etoo prolongó su discurso señalando que «no entiendo por qué quieren echarme mierda encima. Hicimos lo que teníamos que hacer y me insultaron en el túnel de vestuarios. En mi equipo soy yo quien debe tirar del carro y además, me pagan para ganar». El jugador siguió explicando que «hablaré con mis abogados para ver qué pasa. Yo no entiendo por qué les tienen que regalar el partido y si me primasen por ganar cogería el dinero. Por lo tanto, que no busquen excusas porque no es culpa mía. Ellos ganaban 0-2 y lo que tiene que hacer él -Luis Fernández- es mirar qué pasó con su planteamiento. No tienen por qué acusarnos de nada», sentenció. «Demostró que no tiene confianza en sí mismo, pero si les va mal, los únicos culpables son ellos».
En relación a su posible ausencia en Vigo, Samuel destacó que «si estoy bien estaré junto a mis compañeros, pero si no, no iré. Arrastro dolores y ahora no tengo presión. De aquí a diez días tengo la clasificación para el Mundial y no arriesgaré, así de claro». Para el atacante no se acabaron ahí los argumentos: «Que no me echen a la gente encima y que se preocupe de su equipo. Además, pienso que la gente que vela por la ley del fútbol tiene que ver estas cosas porque se tienen que sancionar», exigió. Sin apartarse del tema, amenazó: «Si abro la boca, muchos se morirán de vergüenza y no podrán salir de su casa. Me duele porque es gente por la que he hecho muchas cosas y que el otro día me insultó gravemente». En cuanto a su futuro, el futbolista subrayó que «lo único que quiero es progresar y ganar títulos. No nos podemos conformar con la permanencia. Si hubiese más ambición me quedaría encantado, aunque aún no me he ido».