Amador Pons / Efe
Acostumbrada a meterse en las finales de las competiciones
importantes, Roser Vives quiere aprovechar que el Campeonato de
Europa se disputa en España para lanzar un mensaje a sus rivales en
los Juegos Olímpicos de Atenas. La nadadora mallorquina aspira a
meterse en la final de mañana domingo en la prueba de los 200
metros mariposa, donde ya no renunciará a nada. Roser Vives cuenta
con la quinta mejor marca de las inscritas en el Campeonato de
Europa de Madrid. Su participación en los anteriores Mundiales y
Europeos la situó en el grupo de favoritas, pero la nadadora del CN
Palma llegó a las finales de estas competiciones sin fuerzas.
Mientras sus rivales podían permitirse no nadar al máximo las
clasificatorias y las semifinales, la mallorquina se veía obligada
a desfondarse para ganarse una plaza entre las ocho mejores.
A este Europeo llega mejor preparada, aunque su principal objetivo del curso son los Juegos Olímpicos. Hoy nadará por la mañana las clasificatorias y por la tarde las semifinales, y confía clasificarse para la final de mañana domingo por la tarde, un horario en el que se siente más cómoda. Sin duda, clasificarse para la final sería una advertencia para las rivales de Atenas. En la jornada de ayer, el holandés Pieter van den Hoogenband volvió a subir a los más alto del podio en los 200 metros libre y revalidó su título europeo de la distancia, mientras que España sumó una nueva medalla de bronce, en los 100 espalda con Nina Zhivanevskaya.
El holandés campeón olímpico de los 100 y 200 metros en Sydney 2000 volvió hoy a sentir en Madrid lo que es el oro del campeón tras la decepción de los pasados mundiales. Van den Hoogenband, que fue derrotado en los pasados Mundiales de Barcelona por el australiano Ian Thorpe en esta distancia y esta semana en los 100 metros libre por el italiano Filippo Magnini, sólo había vuelto a ganar en los europeos de Dublín en piscina corta, una competición menor. Tras el holandés, el ruso Andrey Kapralov se llevó ayer la medalla de plata y los italiano Filippo Magnini y Massimilano Rossolino, empatados con el tercer tiempo, el bronce. El español Olaf Wildeboer logró en los dos últimos largos el séptimo puesto tras luchar por evitar el último con el danés Jacob Carstensen. Wildeboer hizo 1:50.87 sin opciones de luchar con los primeros y lejos de su mejor marca, el récord nacional, con 1:49.17. Nina Zhivanevskaya ganó la medalla de bronce en los 100 metros espalda, por detrás de la francesa Laure Manaudou, oro, y la rusa Stanislava Komarova, plata. La española tuvo la mejor reacción en la salida y cubrió los primeros 100 metros en la segunda posición tras Manaudou, pero ya acosada por la rusa. Zhivanevskaya no pudo en el último largo aguantar el ataque de Komarova, que marcó 1:01.89 por 1:02.38 de Nina, y 1:00.93 de la ganadora.