Agencias|MADRID
El entrenador del Real Mallorca, Luis Aragonés, tuvo palabras de
elogio hacia la estrella principal de su equipo, el camerunés
Samuel Etoo, que brilló con luz propia en el Santiago Bernabéu tras
lograr dos auténticos golazos que posibilitaron un nuevo triunfo
del Mallorca en el coliseo blanco.
«Es un futbolista de tamaño impresionante. Está entre los diez mejores jugadores del mundo», afirmó el técnico, sabedor de que entre sus manos tiene un jugador «con una velocidad endiablada». La motivación de jugar en el Bernabéu es importante, pero también la condición física y se nota que lleva trabajando con continuidad quince días», asegura el técnico.
El madrileño no pudo evitar referirse al Madrid, al que definió como «un equipo que tiene ansiedad. Los últimos resultados que viene firmando han sido malos y perder le ha producido ansiedad, así la circulación no es buena y no ha tenido ocasiones. Les dominamos totalmente», agregó sobre el duelo del sábado. Para Luis, siempre «es muy bonito vencer en el Bernabéu», aunque la misión no implique una empresa sencilla. «Ganar es bueno en cualquier lado. Nos costaba mucho salir de ahí y hemos sufrido mucho. Nos quedan dos partidos muy peligrosos y en Chamartín ganamos un partido que no es fácil. Vencer en un escenario como ese es complicado porque además llegaron poco a nuestra portería», indicó.
Tampoco Etoo, al que califica de «jugador de una talla impresionante», pasó desapercibido para el entrenador en su discurso posterior al partido. «No quiero echarle más flores, pero si él quiere, no sé ni dónde puede llegar. Está entre los diez mejores jugadores del mundo», sentenció Aragonés.
Las declaraciones del preparador bermellón contrastaban con las de su colega Carlos Queiroz, que atraviesa por una situación durísima en el vestuario blanco después de los últimos resultados. El portugués atribuía la tercera derrota consecutiva de su equipo en casa a que «el equipo empezó el partido con mucha ansiedad y nerviosismo. Queremos resolver las cosas de forma rápida y ésa no es la mejor forma de hacerlo. Debemos construir desde atrás pero hay que reconocer que cuando la mente nos traiciona las cosas no salen».