El partido más importante de la historia del Drac Inca y el más trascendental de los últimos tiempos para el baloncesto mallorquín va camino de rubricar el lleno en un Palau d'Esports que se erige en una de las armas que esgrimirá el cuadro de es Raiguer en el quinto y definitivo encuentro de la serie por la permanencia frente al Ourense (viernes, 21 horas). En la ciudad, el encuentro ya es tema de conversación habitual, y la demanda de entradas parece haberse disparado. Para facilitar a todos los aficionados de la Isla su asistencia al choque, en el que está en juego la supervivencia entre la élite del deporte de la canasta y evitar el descenso a LEB2, la entidad ha dispuesto una serie de medidas. Se ha mantenido el cinco por uno. Es decir, que cada socio podrá recoger durante la semana cinco invitaciones. Además, todos los federados podrán recoger en la sede de la Federació de Bàsquet de les Illes Balears sus entradas. Con todo ello, se quiere reunir en las gradas al grueso de la familia del baloncesto mallorquín, que debe responder a la llamada de su máximo representante en categoría masculina en el momento más delicado de su devenir dentro de la cada vez más exigente y reconocida Liga LEB.
En la junta directiva extraordinaria realizada ayer por el club, se decidió al mismo tiempo poner en marcha la venta anticipada de localidades en el Palau, aunque los que adquieran su entrada antes del choque podrán hacerse por el precio de cinco euros con dos asientos. En taquilla y el día del choque, el coste de las localidades ascenderá a cinco euros cada una, con lo que se espera asegurar una excelente entrada. Para facilitar el traslado de seguidores procedentes de Palma y otras localidades de es Raiguer, el Drac Inca intentará a lo largo de la jornada de hoy llegar a un acuerdo con Serveis Ferroviaris de Mallorca, pese a que algunos clubes ya trabajan para desplazar a sus equipos en autocar u otro medio hasta el Palau.
En este punto no finaliza el catálogo de intenciones del club, que en previsión de la mejor entrada de los últimos años dispondrá tras las canastas dos gradas supletorias, con las que de dará cabida a los centenares de hinchas que se unirán a los ya habituales de cada encuentro. Otra de las medidas aprobadas por la directiva es la elaboración de camisetas conmemorativas del encuentro, con las que dar un toque de color, que tendrá un complemento ideal con los palos hinchables gualdinegros que se entregarán a los asistentes, con la intención de generar un ambiente que intimide al Ourense, a la usanza del que halló el Drac Inca en sus visitas al Pazo Paco Paz de la ciudad gallega.