El baloncesto femenino mallorquín afronta el mes más importante de su dilatada historia. Después de un buen puñado de años alejado de los lugares de privilegio, el deporte de la canasta rellena un vacío y orienta sus miras hacia la élite. Olis Sóller y Nacex Jovent ponen la directa hacia la Liga Femenina después de marcar la pauta en la categoría de plata. Su dominio en el grupo B de la Liga Femenina 2 ha resultado insultante, en especial el del conjunto de Miquel Ballester, que ha acabado en primera posición y con únicamente tres derrotas en su haber, lo que les convierte en el equipo más regular de toda la competición. Por ello, y en caso de que accedieran a la final -con el billete a la máxima categoría en el bolsillo-, ésta se celebraría en Sóller y con el pabellón Es Puig como testigo directo de la hipotética proeza. Pero el Olis Sóller no ha estado solo. El otro representante balear también aspira a acompañar en breve al Puig d'en Valls en Liga Femenina. El Nacex Jovent, uno de los clásicos y fundador de la LF2, se ha colado por méritos propios en la segunda plaza y también contará con el factor pista en los playoffs. Las de Ciutat, bajo la batuta de As García, han recogido el trabajo de las tres últimas campañas, que se comprime en una excelente ocasión para asaltar la cima. El único inconveniente es la presencia del Canoe en su parte del cuadro. Una hipotética semifinal con las madrileñas, con factor pista en contra, se antoja como una opción probable, pero al mismo tiempo como el máximo desafío.
En todos los pronósticos, el Olis Sóller ocupa un lugar destacado. Su plantel pasa por ser el más completo y no ha tenido rivales. La argentina Carolina Sánchez -16,8 puntos y 16,7 de valoración por partido- es su estrella, sin dejar de lado a un grupo de trabajo en el que las exteriores tienen mucho que decir. Marta Díez, Laura Fernández y Marie Vicente están entre las mejores pasadoras; además, Raquel Sánchez de la Campa, Anke Dietel y Dácil Melián ofrecen las garantías suficientes bajo los tableros. El resultado de la mezcla, a la que se unen Ana Hogg, Alicia Pérez, Lonneke Yntema y María Moreno, no es otro que una escuadra invencible y que quiere resarcirse de la eliminación ante Rivas Futura en las semifinales del pasado año. El sábado tienen su primer examen en Avilés. La cancha del Santos Adba, la muñeca de Paula Fernández y el tándem foráneo formado por Anna Cecilia Lindquist y Anna Christina Barthold aguardan. El siguiente fin de semana deben sentenciar en Es Puig, y aguardar rival, que saldrá del cruce entre Mercaleón y Viladecans.
Más complicado se antoja el camino que le aguarda a un Nacex Jovent que ha culminado la labor de una entidad volcada con la base y el baloncesto femenino. El club de sa Indioteria vive un dulce momento y ahora es cuestión de disfrutar y buscar la sorpresa. Argumentos tiene para hacerlo. El más contundente es Elsa Donaire. La ala-pívot fue la apuesta más firme de la pasada campaña, en la que se sentaron las bases de una plantilla compensada y dotada de clase, fuerza y carácter. En su segunda campaña, Donaire ha explotado definitivamente, con una valoración media de 18, 9,7 rebotes y 1,8 asistencias por partido. No podemos pasar de largo a María Vilouta, máxima anotadora del Nacex y exponente del equilibrio adquirido con las nuevas incorporaciones. Cristina López, Judith Viñuela, Vanessa Picallo o Antònia Solà son el mejor ejemplo, aunque las jugadoras de la casa -Tere Pecos, Gloria Jábega...- también se han hecho notar. La recuperación de Sandra Peña ha sido la mejor noticia y su papel ha de ser fundamental en el juego interior.