Temporada 2000-01. Jornada 33. El Mallorca es cuarto en la tabla con 56 puntos, a tres del Valencia y a cinco del Deportivo, segundo. Llega la hora decisiva. Luis Aragonés aisla al vestuario de todos los rumores que le apuntan como el futuro entrenador del Atlético de Madrid. El técnico se centra en un único objetivo, dejar al Mallorca en posiciones de Champions League. Y la plantilla responde. Gana los cinco últimos partidos de Liga y pelea por el subcampeonato con el Deportivo hasta la última jornada. Ese sprint final le permite superar en cinco puntos su récord (71 puntos) y marcar más goles que nunca (61). Temporada 2003-04. Jornada 33. El Mallorca es cuarto por la cola con 36 puntos, dos más que Espanyol y tres por encima del Celta, ambos en posiciones de descenso. Luis trata de blindar la caseta del pesimismo que se respira en el entorno tras la derrota del pasado domingo en Son Moix.
El técnico madrileño ha demostrado que se mueve como pez en el agua en situaciones límite. Aunque no existe comparación posible entre ambas etapas, a buen seguro que Luis le habrá recordado a los supervivientes de su primera etapa, como Leo Franco, Miki Garro, Olaizola, Nadal, Niño, Marcos, Finidi y Samuel Etoo, aquel impresionante repóquer para afrontar las cinco últimas jornadas con el depósito de confianza a tope. Aquel primer Mallorca de Luis se jugó la Champions en las cinco últimas jornadas y con algunos contratiempos importantes. Miki Garro, debutante ese año en la máxima categoría, se adueñó de la portería en esas cinco últimas jornadas por las lesiones de Leo Franco y Mono Burgos. El portero mallorquín cumplió con creces y fue una de las claves de la tercera plaza.
El Mallorca inició su escalada tras perder en Pamplona (1-0) en la jornada 33. Se rehizo de esa derrota en El Sadar vengándose del Celta, que le había eliminado de la Copa, gracias a dos goles de Finidi (2-0). La siguiente semana venció en Montjuic (0-1) gracias a un tanto de Luque. El destino volverá a emparejar al Mallorca con vigueses y espanyolistas en esta recta final. A tres jornadas para el final, su goleada al Rayo (4-0) y el empate del Valencia en Santander le permite superar a los valencianistas y asaltar la tercera plaza, a sólo dos puntos del subcampeonato. Las dos últimas jornadas son de infarto. El Deportivo defiende esa segunda plaza con uñas y dientes, venciendo en Mestalla y al Málaga. El Mallorca tampoco falla. Golea en Vitoria (2-4) y cierra el telón liguero con una victoria ante el Oviedo (4-2). Esa impresionante racha de cinco victorias consecutivas no le basta para conquistar el subcampeonato, pero sí para sellar su mejor temporada.